El embajador sueco celebra la Fiesta de Midsommar en uno de sus últimos eventos en España

Debido a la lluvia, la fiesta se trasladó al interior de la Embajada y el embajador Teppo Tauriainen tuvo dar su discurso ¡de pie sobre una mesa!

El embajador sueco, Teppo Tauriainen, brindó por el Midsommar'24 con los invitados. /Fotos: Manu Vega Fotografía.

Juan David Latorre

El embajador de Suecia, Teppo Tauriainen, invitó el pasado martes a la tradicional Fiesta de Midsommar en la residencia de la Embajada. Durante la velada se pudo descubrir la cultura sueca a través de su música y gastronomía en un ambiente distendido y veraniego.

Unos 300 invitados acudieron a celebrar la Fiesta de Mindsommar, que tuvieron que refugiarse en el interior de la sede diplomática debido al fuerte aguacero que cayó justo durante la celebración.

De manera improvisada, el embajador Teppo Tauriainen tuvo dar su discurso ¡de pie sobre una mesa! Y señaló ante la admiración de los asistentes, “el Midsommar es uno de los días festivos más importantes del año en Suecia (como San Juan en España), que siempre se celebra el tercer viernes de junio en relación con el solsticio. En Suecia celebramos el inicio del verano y el periodo de las vacaciones. Lo celebramos con la familia y los amigos con comida y bebidas, siempre y cuando sea posible al aire libre”.

Esta celebración de la Fiesta de Midsommar fue uno de los últimos eventos en España para el embajador sueco antes de regresar a Suecia. Solo quedan unas semanas. “Cinco años han pasado muy rápido, indicó, pero ha sido una experiencia maravillosa. Desde el principio, me he sentido como en casa en España y Madrid.”

Agradeció el embajador al equipo de la Embajada y a los representantes del resto de Team Sweden España su excelente cooperación durante estos cinco años.  “Juntos, señaló, hemos contribuido a promover los intereses suecos en España y las relaciones bilaterales entre nuestros países.”

Durante la noche también se pudo escuchar música de la estrella emergente Tatiana de la Luz, que interpretó algunas canciones suecas con un toque de España de hoy.

Los invitados a la fiesta pudieron degustar comida típica sueca.

El fuerte aguacero que cayó durante la celebración fue rápidamente solventado por la planificación sueca y la improvisación española.

El embajador Teppo Tauriainen se despidió de los invitados y agradeció la cooperación de su equipo al frente de la Embajada.
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