The Diplomat
El embajador de Panamá, Allen Sellers Lara, presentó el pasado jueves en Casa América la conferencia titulada De Galicia a Panamá: los gallegos en la construcción del canal interoceánico, que estuvo a cargo del panameño Ricardo Gago, presidente de la Fundación Nosa Terra.
En un salón Miguel de Cervantes de la sede cultural de la Plaza de Cibeles de Madrid abarrotado de ciudadanos panameños, el embajador Allen Sellers agradeció el “rigor académico” de la Fundación Nosa Terra en la investigación y recopilación de datos históricos de esos años y en esas circunstancias.
“La historia de nuestros dos países, señaló el embajador panameño, se está construyendo ahora mismo todavía a ambas orillas del Atlántico. Quiero decir a los estudiantes, a los científicos, a los inversionistas españoles que hoy se quieren abrir paso en Panamá que recientemente ha sido designado como uno de los mejores destinos para radicarse. Asimismo, la gente que viene de allí, de Panamá, los productores agrícolas, los vendedores, los estudiantes también que vienen a España a construirse un futuro y a construir esa historia.”
Seguidamente, tomó la palabra Ricardo Gago, que detalló minuciosamente y con datos la cantidad de gallegos que fueron a trabajar en la construcción del Canal y que causaron admiración en las autoridades estadounidenses por su “resistencia, constancia y docilidad a la hora de trabajar”. Desgraciadamente, también eso se tradujo en unas condiciones laborales casi esclavistas para unos hombres que habían huido de España buscando un futuro digno dada la miseria social en la que se vivió durante el reinado de Alfonso XIII.
Los obreros españoles fueron el segundo contingente más numeroso reclutado por agentes de los Estados Unidos para construir el Canal de Panamá (1904-1914), el cual permitió la unión interoceánica. De estos españoles, tres de cada cuatro eran gallegos.
Las cifras oficiales de la Comisión del Canal Istmeño indican que se reclutaron para esta magna obra, 8.298 españoles, que mayoritariamente trabajaron como operarios en las vías férreas y, sobre todo, obreros de pico y pala. Sin embargo, los resultados preliminares de una nueva investigación financiada por la Fundación Nosa Terra arrojan un mayor número de trabajadores españoles, a los que hay que sumar los que llegaron por sus propios medios ilegalmente, tras la prohibición del gobierno español de emigrar a Panamá en 1908 y a otros inmigrantes clandestinos.
La Fundación Nosa Terra busca dar a conocer activamente la participación de Galicia en la construcción del canal, así como sus muchos y variados aportes a Panamá a lo largo de los años. La Fundación trabaja actualmente en la edición de un libro, un archivo digital y la construcción de un monumento escultórico dedicado a los miles de gallegos que dieron alma, vida y corazón, para construir el Canal de Panamá.