Los responsables de Podemos en la presentación de su programa económico./ Foto: RM/La Razón.
Miguel Cifuentes. Madrid
Podemos, el partido emergente en España, empieza a tomar tierra y abandona sus propuestas imposibles. Ha pasado del populismo bolivariano al modelo socialista sueco. Ahora su modelo ya no es la Venezuela de Chaves; es el Estado de Bienestar de los países nórdicos de Europa, financiado con altos impuestos a los ricos y a la gran empresa, tasas a la banca y a las transacciones financieras y persecución radical del fraude fiscal y la economía sumergida.
La formación de Pablo Iglesias presentó, por fin, su programa económico, con notables novedades con respecto a las ideas ofertadas en su propaganda electoral de los pasados comicios europeos. Estas son las claves de sus cambios hacia una peculiar socialdemocracia: Abandonan la negativa a pagar la deuda pública y apuestan por una reestructuración en un marco europeo. Adiós a la renta básica para todos los ciudadanos y la jubilación a los 60 años, pero quieren una banca pública y más impuestos a las grandes empresas y a los ricos.
Proponen medidas insólitas como subidas de salarios al nivel de hace 10 años, el reconocimiento de “el derecho al crédito” y convertir el ICO en un banco público para pymes y familias. Su modelo es el Estado de Bienestar nórdico, con fuerte administración pública y altos impuestos. Han cogido la bandera radical de GESTHA, el sindicato de Técnicos de Hacienda, contra el fraude y la economía sumergida. Suprimir esta lacra recaudaría cerca de 50.000 millones.
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Pese a todo, sus economistas keynesianos, Torres y Navarro, apuestan por una economía intervenida
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Los autores del programa son dos maduros economistas keynesianos, Viçens Navarro, profesor de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona y la John Hopkins de USA, y Juan Torres, catedrático de la Universidad de Sevilla. Ambos han bajado al suelo a los jóvenes dirigentes radicales poniendo números y algo de sensatez a las disparatadas ofertas del programa de Podemos en las pasadas elecciones europeas.
Los dos profesores, de ideología netamente izquierdista, han cepillado los números, pero siguen sin salir, al menos en el modelo capitalista actual. No obstante Podemos seguirá apostando por políticas de izquierda, mas intervención del Estado y más impuestos. Aunque ahora el programa debe ser debatido por los militantes del partido, no se esperan grandes cambios dado el fortísimo ascendiente que Pablo Iglesias y su núcleo duro tienen sobre el partido.
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Iglesias es consciente de que su programa radical resulta inviable
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Iglesias lleva semanas girando desde el radicalismo inicial, consciente de que su programa era inviable y le alejaba de la centralidad política que persiguen para ganar el poder. Reconocía que el voto de la clase media es necesario para alcanzar el Gobierno. Por ello conectaron con dos conocidos economistas de izquierda, profesores universitarios, que podían rehacer sus propuestas, darles racionalidad y hacerlas creíbles, aunque pierdan radicalidad.
Viçens Navarro, economista y profesor de Políticas Públicas, y Juan Torres, catedrático de Economía , miembro de la organización internacional ATTAC (que promueve tasas antiespeculación a la banca y las Bolsas ) se han prestado a hacer un programa algo mas digerible para las elecciones generales de 2015, pero intervencionista y radical de fondo. Han podado las propuestas mas utópicas, de corte bolivariano como el impago de la deuda, o la renta básica para todos los ciudadanos y la jubilación a los 60 años. Todo esto no es financiable, y además la jubilación la devuelven a los 65 años (donde estaba antes de la última reforma).
Otras ideas irrealizables son la obligación de las empresas de subir salarios al nivel de hace 10 años, reducir la jornada a 35 horas (ya fracasada en Francia con los socialistas) , aumentar la recaudación del Impuesto de Sociedades en 5.000 millones al año y un impuesto a superricos, que hoy no tributan por estar emboscados en las Sicav o en paraísos fiscales.
Con medidas antifraude fiscal podrían recaudar 44.000 millones, lo que choca con los modestos objetivos de Hacienda de recaudar 11.000 millones por año. Podemos lleva sin tapujos la bandera de GESTHA, el sindicato de Técnicos de Hacienda, que reclama medidas radicales frente al fraude y la economía sumergida, que en España supone un 23% del PIB, doble de la media europea.
Fuentes de Podemos han señalado a The Diplomat que “son medidas realistas, que chocan por su crudeza, pero son factibles con un Gobierno de mayorías. PP y PSOE no están dispuestos a afrontar la crisis, sino a administrar la crisis en favor de los poderosos, como hacen desde hace 35 años. Por eso han perdido el crédito de los españoles”.