Hollande y Rajoy en la cumbre de 2013.
Eduardo González. Madrid
Las interconexiones eléctricas y la lucha contra el terrorismo y el crimen organizado protagonizarán la XXIV Cumbre franco-española, que se celebrará el próximo día 1 de diciembre en París con la presencia del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y de los ministros de Justicia, Interior, Economía y Competitividad, Industria, Energía y Fomento, entre otros.
La cumbre comenzará en el Elíseo con una reunión entre Rajoy y el presidente de Francia, François Hollande, que coincidirá con los encuentros que mantengan los ministros con sus respectivos homólogos franceses.
Aparte de una puesta en común de cara al próximo Consejo Europeo de diciembre y del intercambio de opiniones sobre el Plan Juncker, uno de los grandes temas de la cumbre será el de las interconexiones energéticas, en el que se tratará de trazar un programa conjunto de actuaciones con identificación de proyectos concretos y una acción común para conseguir financiación europea, según fuentes gubernamentales.
A mediados de octubre, la Comisión Europea advirtió de que España tiene «uno de los niveles de interconexión más bajos de la UE”, por lo que es “particularmente importante” incrementar el intercambio transfronterizo con Francia. España está especialmente interesada en la construcción de nuevas interconexiones eléctricas con Europa, para lo cual depende de la colaboración de Francia, un país que posee un nivel elevado de interconexión con Europa y cuenta con su propia producción eléctrica gracias a su parque nuclear.
España tiene una de las interconexiones más bajas con Europa y depende de la colaboración de Francia
Madrid acusó recientemente a Francia de no marchar al mismo ritmo que España en las interconexiones para favorecer los intereses monopolistas de la eléctrica estatal, una acusación rechazada por París. En la actualidad, la interconexión de España con Francia es del 4%, mientras que la de Francia con Alemania es del 57%, por ejemplo. El pasado 25 de noviembre, la canciller alemana, Angela Merkel, defendió la necesidad mejorar la conexión de la red eléctrica española con la del resto de Europa y admitió que el aislamiento de la península ibérica se debe a la falta de un interconectador en los Pirineos.
Durante la cumbre también se va a abordar la colaboración en la lucha contra el terrorismo, contra el crimen organizado y contra el tráfico ilícito de drogas como «prioridades absolutas en asuntos de interior», según el Gobierno.
En la cumbre franco-española de 2012, los ministros del Interior firmaron un Plan de Acción Trienal de Reforzamiento de la Cooperación en la Lucha contra la Droga cuyo funcionamiento se revisó satisfactoriamente en 2013. Aparte, el pasado mes de junio, los dos ministros se comprometieron a reforzar la cooperación en la lucha contra el terrorismo y la inmigración irregular.