<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, coincidió ayer en Dubái con el presidente de Israel, Isaac Herzog, durante la foto de familia de la vigésimo octava Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP28). Asimismo, mantuvo una conversación telefónica con el ministro israelí de Defensa, Benny Gantz, a quien aseguró que “Israel es un socio y un amigo de España”.</strong></h4> La coincidencia de Sánchez con Herzog, con quien no se reunió en Dubái, se produjo <strong>un día después de que el Gobierno de Benjamin Netanyahu llamase a consultas a su embajadora en España, Radica Radián-Gordon, en protesta por unas nuevas declaraciones del jefe del Ejecutivo</strong> en las que expresó sus “francas dudas” de que la operación militar de Israel en la Franja de Gaza esté ajustándose al Derecho Internacional Humanitario. Aparte, <strong>el presidente del Gobierno mantuvo una conversación telefónica con el ministro de Defensa en lugar de con el primer ministro, Bentamin Netanyahu, que hubiera sido lo más lógico. </strong>“He hablado con el ministro Benny Gantz, a quien he reiterado que <strong>Israel es un socio y un amigo de España</strong>”, declaró Sánchez a través de la red social X. “Una vez más, he condenado los atentados terroristas de Hamás del pasado 7 de octubre”, prosiguió. “España desea la inmediata liberación de todos los rehenes”, aseguró. <strong>“Israel tiene derecho a defenderse de este ataque terrorista, pero he reafirmado que España considera insoportable la muerte de civiles en Gaza y que Israel debe cumplir con el Derecho Internacional Humanitario”</strong>, concluyó Pedro Sánchez. <strong>Benny Gantz</strong> también informó de esta conversación a través de la misma red social. “Hoy he hablado con el presidente del Gobierno español”, a quien “puse al corriente de la guerra y de los acontecimientos regionales” y ante quien “hice hincapié en que, por el bien de la seguridad de Israel, de la seguridad de los civiles israelíes y del restablecimiento de la estabilidad regional, el grupo terrorista Hamás debe ser desmantelado en Gaza”, prosiguió. <strong>“Añadí al presidente del Gobierno que el Estado de Israel concede gran importancia a evitar, en la medida de lo posible, las víctimas civiles”</strong>, aseguró. “Hamás, por el contrario, sigue perpetrando horribles crímenes contra la humanidad, como utilizar a niños y mujeres como escudos humanos para sus actividades terroristas”, concluyó. La decisión de retirar a la embajadora en España, un movimiento inédito por parte de Israel con un país occidental, se produjo un día después de que el ministro israelí de Exteriores, Eli Cohen, mantuviera una reunión con su homólogo español, José Manuel Albares, en un intento por parte de España de tratar de enfriar la crisis diplomática. Tras la llamada a consultas de la embajadora israelí, no se ha producido ninguna reacción por parte del Ministerio de Asuntos Exteriores español. El pasado viernes, Eli Cohen convocó a la embajadora de España en Tel Aviv, Ana Sálomon, después de acusar a Pedro Sánchez de “apoyar el terrorismo” por afirmar, durante su gira por Israel, Palestina y Egipto (en la que fue recibido por Netanyahu en Jerusalén), que la respuesta de Israel al atentado de Hamás estaba siendo “desproporcionada” y que España defiende “un alto el fuego duradero” en la Franja de Gaza. En respuesta a ello, José Manuel Albares convocó a la embajadora de Israel en Madrid, a quien trasladó que “las palabras completamente falsas que dirigió el Gobierno de Israel hacia Pedro Sánchez son inaceptables para nosotros y no pueden volver a producirse nunca”. <h5><strong>Bustinduy elude calificar de terrorista a Hamás</strong></h5> Ayer, ante los periodistas, <strong>el ministro de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy</strong>, afirmó que la crisis diplomática abierta con España es una «sobreactuación» para desviar la atención sobre lo que está ocurriendo en la Franja. Según el ministro, que forma parte de la cuota de Sumar en el Ejecutivo, la comunidad internacional debería seguir el ejemplo del Gobierno de España y movilizarse para poner fin a la «barbarie injustificable» de Israel sobre Gaza. Al ser preguntado en dos ocasiones por los periodistas <strong>si considera que Hamas es un grupo terrorista, Bustunduy evitó responder</strong> y se limitó a afirmar que la situación en Palestina es un «fracaso absoluto» de la comunidad internacional y a señalar la necesidad de actuar para garantizar los derechos humanos y las libertades de la población palestina.