<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <strong>El Club de Madrid insta a las autoridades de Azerbaiyán a levantar el bloqueo del corredor de Lachin y permitir el acceso de ayuda humanitaria a la región del enclave de Nagorno-Karabaj</strong> en la que viven 120.000 armenios. El corredor de Lachin está bloqueado desde hace meses por Azerbaiyán, lo que ha provocado una <strong>grave escasez de alimentos, medicamentos, productos de higiene y combustible en la región separatista.</strong> El Club de Madrid, que reúne a más de un centenar de ex jefes de Estado y de Gobierno ha hecho pública una nota en la que expresa su “profunda preocupación” por la “crítica situación humanitaria” en Nagorno-Karabaj, territorio en disputa entre Azerbaiyán y Armenia. La organización pide a las autoridades de Baku que “se adhieran a los compromisos de los acuerdos de alto el fuego de noviembre de 2020, levanten el bloqueo que está provocando una grave escasez de alimentos, medicamentos y combustible en Nagorno-Karabaj y restablezcan la circulación sin restricciones y segura de personas, vehículos y mercancías en ambas direcciones a través del corredor de Lachin”. Tras señalar que “la ayuda humanitaria nunca debe politizarse”, el Club de Madrid expresa su pleno apoyo a las iniciativas encaminadas a promover unas relaciones pacíficas y normalizadas entre Armenia y Azerbaiyán, y afirma: “El multilateralismo y el diálogo son los medios más efectivos para resolver conflictos. La comunidad internacional debe seguir comprometida con ellos en la búsqueda de una paz sostenible en la región”. El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) pide desde hace más de un a Azerbaiyán y a Armenia que alcancen un "consenso humanitario" para permitir la reanudación del paso de convoyes humanitarios a través del corredor. Las autoridades de Azerbaiyán anunciaron el 11 de julio la suspensión "temporal" del tráfico a través de un "puesto fronterizo" instalado en abril en el corredor de Lachín --en medio de críticas por parte de Armenia-- tras denunciar "contrabando" de teléfonos móviles, cargadores, cigarrillos y otros materiales en vehículos del CICR. Esta organización asegura que "no se ha encontrado material no autorizado en ningún vehículo propiedad del CICR".