<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El Gobierno ha autorizado la adquisición de chalecos y cascos de protección balística para determinadas representaciones de España en zonas de riesgo, concretamente en el Sahel, por un importe de 116.281 euros.</strong></h4> El Consejo de Ministros tomó ayer razón de la declaración de emergencia para la contratación del suministro de <strong>cien chalecos de alta protección compuestos por portaplaca táctico polivalente y juego de placas balísticas con blindaje NIVEL IV y de cien cascos balísticos con blindaje NIVEL IIIA, por un importe de 116.281 euros</strong> (IVA incluido), “para determinadas representaciones de riesgo de España en el exterior”. <strong>La zona del Sahel</strong>, según el Gobierno, “se encuentra inmersa en una situación de crecientes turbulencias políticas e inestabilidad social, dando lugar, en algunos casos, a conflictos de naturaleza armada”. En este contexto, prosigue, <strong>“el debilitamiento de los indicadores de seguridad en algunos países con potencial riesgo terrorista ha elevado al máximo el nivel de inseguridad, motivando el cierre temporal de algunas de nuestras misiones diplomáticas”.</strong> <strong>“En este escenario es preciso elevar y reforzar las medidas de seguridad, dotándolas del material de seguridad específico, especialmente para que los desplazamientos del personal destacado -dentro de su actividad diplomática y administrativa- se produzcan con las mayores garantías de seguridad”</strong>, añade. En consecuencia, se ha procedido a la declaración de emergencia para la contratación del suministro del citado material de protección y se ha dado cuenta de ello al Consejo de Ministros en aplicación de la Ley de Contratos del Sector Público, de 2017. El pasado 30 de junio, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas aprobó por unanimidad la retirada de la <strong>Misión Multidimensional Integrada de Estabilización de la ONU en Mali (MINUSMA)</strong> después de que la junta militar que gobierna en Bamako exigiese la retirada “inmediata” de la misión, que llevaba diez años en el país y contaba con cerca de 13.000 efectivos. España, presente en esta misión desde su inicio en 2013, aportaba cerca de 140 efectivos, según el Estado Mayor de la Defensa. Asimismo, España participa en la misión EUTM Mali, encargada del entrenamiento de las fuerzas de seguridad malienses, pero tanto la retirada de MINUSMA como la presencia de los mercenarios rusos del Grupo Wagner junto a las tropas han complicado sobremanera la continuidad de esta misión. Burkina Faso, uno de los principales contribuyentes con efectivos a la MINUSMA, ha respaldado la petición de Mali. Tanto un país como el otro están en manos de juntas militares y mantienen una buena relación con Rusia (aunque Burkina Faso no ha permitido la entrada de Wagner, a diferencia de Mali). <strong>La Embajada de España en Bamako cubre, precisamente, la representación diplomática en Mali y Burkina Faso</strong>. Aparte, <strong>Sudán</strong> sufre, desde el pasado mes de abril, enfrentamientos armados en Jartum y otros puntos del país entre el Ejército Sudanés y un grupo paramilitar llamado Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF). Como consecuencia de ello, <strong>la Embajada de España en Jartum ha suspendido sus actividades hasta que las condiciones de seguridad permitan su reapertura.</strong>