A medida que el mundo va superando la pandemia de la covid-19 y se van levantando la mayoría de las restricciones fronterizas, los países de todo el mundo intensifican los esfuerzos para recuperar la salud y el bienestar global y promover la realización de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas. La República de China (Taiwán) apoya plenamente los ODS relacionados con la salud, y está dispuesto y capacitado para compartir su experiencia en la creación de un enfoque de salud intersectorial e innovador para ayudar a la comunidad internacional a trabajar hacia la realización de tales objetivos relacionados con la salud y el bienestar.
Durante la pandemia de la covid-19, el modelo de respuesta antipandémica de Taiwán incluyó un despliegue avanzado y mecanismos de rápida respuesta, además de políticas de control fronterizo, distribución coordinada de recursos médicos y un sistema de transferencia de pacientes para prevenir y contener la pandemia en un momento en que las vacunas y los medicamentos antivirales no estaban disponibles. Por su parte, el pueblo taiwanés desempeñó un papel fundamental en el éxito del modelo antipandémico de Taiwán al usar mascarillas, practicar el distanciamiento social, evitar áreas concurridas, seguir las normas de cuarentena y la vacunación. En comparación con los 38 estados miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) más Singapur, Taiwán ocupa el sexto lugar más bajo en las tasas de mortalidad y letalidad de la covid-19. Taiwán también ocupa el cuarto lugar en cuanto a tasas de cobertura de al menos una dosis de vacuna contra la covid-19, y el tercer lugar en términos de vacunas de refuerzo administradas.
En 1995, Taiwán estableció el Seguro Nacional de Salud de Taiwán (NHI, siglas en inglés), un eficaz sistema de cobertura universal. Desde entonces, el gobierno ha continuado brindando servicios de salud y prevención de enfermedades para que las personas de todas las edades puedan disfrutar del derecho a la salud. Se trata de un excelente ejemplo de cobertura de salud universal, que ofrece protección financiera y acceso a una amplia gama de servicios esenciales. La pandemia de la covid-19 ayudó a la comunidad internacional a reconocer la importancia de la cooperación regional y de la digitalización en el cuidado de la salud. Taiwán está comprometido con la promoción de la salud digital y la innovación para mejorar la accesibilidad y la calidad de los servicios de atención médica, incluidos los planes para un programa NHI de próxima generación.
Pese a todo, Taiwán no ha sido invitado a la Asamblea Mundial de la Salud desde 2017. Ahora que la pandemia de la covid-19 está disminuyendo y se está acelerando el diálogo sobre el fortalecimiento de los sistemas de salud en todo el mundo, Taiwán no debe quedarse fuera. Taiwán puede ayudar, y la inclusión de Taiwán haría que el mundo fuera más saludable, más sostenible y más equitativo.
Taiwán insta a la OMS y a todas las partes interesadas relevantes a apoyar su inclusión en la Asamblea Mundial de la Salud como observador, así como su plena participación en las reuniones, mecanismos y actividades de la OMS. Taiwán continuará trabajando con el mundo para ayudar a garantizar el derecho fundamental a la salud consagrado en la Constitución de la OMS. En el espíritu de los ODS, ningún país debe quedarse atrás, especialmente Taiwán, que ha hecho significativas contribuciones a la salud pública mundial.
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