<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, concluyó ayer en Eslovenia su última gira por varios países europeos de cara a la Presidencia española del Consejo de la UE, donde consiguió recabar un nuevo apoyo a su propuesta de reforma del mercado energético y acordó la celebración de una primera cumbre bilateral antes del verano.</strong></h4> Sánchez fue recibido por <strong>el primer ministro de Eslovenia, Robert Golob</strong>, en el castillo de Brdo, en Kranj, a 20 kilómetros al norte de la capital, Liubliana. Durante la visita oficial, la primera de un presidente español a Eslovenia, ambos líderes acordaron la celebración de <strong>una cumbre bilateral “que permitirá estrechar las relaciones en diversas materias, con especial interés en el área económica”</strong>, según informó Moncloa. Al respecto, el primer ministro esloveno explicó en la rueda de prensa posterior al encuentro que ambos habían llegado a un acuerdo para <strong>organizar, “antes del verano, reuniones a nivel de gobiernos y un foro empresarial” </strong>que contribuyan a “aumentar la cooperación entre los dos países en los mercados globales”. Según Golob, Eslovenia está especialmente interesada en un aumento de las inversiones españolas en salud, industria farmacéutica y energía. En la misma rueda de prensa, <strong>Pedro Sánchez aseguró que una de las prioridades de la Presidencia española será la defensa de la competitividad económica de la Unión Europea y de la llamada “autonomía estratégica abierta” </strong>-en un contexto geopolítico marcado por la crisis energética derivada de la guerra en Ucrania, la aprobación del Inflation Reduction Act (IRA) por parte de Estados Unidos o la competencia de China- a través de una hoja de ruta basada en cuatro aspectos clave: “energía, sanidad, sector primario y nuevas tecnologías”. En este sentido, Sánchez insistió, el igual que hizo el día anterior en Austria y Croacia, <strong>en la necesidad de promover, durante el semestre de la Presidencia del Consejo de la UE, la reforma del mercado eléctrico a través de un nuevo marco normativo que mitigue los precios y reduzca la volatilidad</strong>. La meta, según Sánchez, es encontrar una regulación que asegure el equilibrio entre la promoción de la política industrial europea y el mercado interior. Por su parte, <strong>Golob también defendió “la autonomía estratégica abierta de la Unión Europea”</strong>, un tema que <strong>“decidirá a largo plazo si Europa seguirá siendo o no un continente de prosperidad”,</strong> y advirtió, en la misma línea que Pedro Sánchez, que <strong>Europa necesita “una economía viable y competitiva” y que esa competencia pasa por abordar los precios actuales de la energía, que son “inaceptables”. </strong>