Aunque es desconocido para la mayoría, los coches cuentan con un sistema de asistencia a la frenada que hace que no sea necesario ejercer demasiada fuerza para frenar el coche. Se trata del servofreno, una pieza muy importante en los vehículos más modernos, que aplica una fuerza superior sobre el pedal de freno a la que ejercemos realmente.
Por ello, es fundamental que el servofreno funcione correctamente, y para ello, es importante cumplir con las revisiones pertinentes y llevar un buen mantenimiento, para así reducir cualquier mínimo riesgo en caso de que sufra cualquier mínimo daño o desgaste.
Así mismo, es importante cambiarlo al experimentar síntomas de fallo de cualquier tipo, ya que de lo contrario puede suponer un riesgo para nuestra seguridad.
Y, como sabemos que es posible que no sepas si está averiado o si por el contrario funciona correctamente, a continuación, te vamos a contar cómo identificar una avería en el servofreno, para que en caso de que algo no vaya bien, puedas detectarla rápidamente y, sobre todo, solucionarla.
Así mismo, también vamos a dar los pasos para sustituir el servofreno, aunque por nuestra experiencia, si no tienes los conocimientos ni los medios necesarios, recomendamos acudir a un taller profesional.
Y, en caso de que tengas que renovarlo, en Daparto podrás comparar los diferentes servofrenos para tu modelo de coche, asegurándote así de hacerte con uno que sea apto para tu vehículo, al precio más económico posible.
Señales que indican que tu servofreno está averiado
El vehículo tarda en frenar más de lo normal
La primera señal de una avería en el servofreno es que el vehículo tarda más en frenar y en detenerse completamente, un síntoma muy habitual en aquellos coches en los que el servofreno lleva equipado un filtro, que se ha ido deteriorando con el paso del tiempo, lo que provoca que actúe con una mayor lentitud, afectando negativamente a la frenada.
El pedal del freno está excesivamente duro
Otra señal muy clara de que el servofreno está averiado es que el pedal de freno esté muy duro, y que para poder frenar tengas que pisar con más fuerza de lo habitual, teniendo que esforzarte en exceso.
La principal razón de que esto ocurra es que una de las paletas del depresor se ha estropeado, lo que hace que esta no sea capaz de crear el vacío necesario, actuando como un freno normal. También puede deberse a una rotura en la tubería de vacío.
Y, aunque es algo más complejo, una rotura en la válvula de retención en la entrada del servofreno también puede ser la causa de que el pedal esté tan duro, así como un problema en la membrana del mismo, que haría que bajase el nivel del líquido de frenos a un ritmo superior a lo habitual.
El pedal se endurece cuando frenas con el coche en marcha
Y otro síntoma claro de avería en el servofreno es que el pedal de freno se vaya endureciendo progresivamente al frenar en marcha, lo que haría que perdiese efectividad. Cuando todo funciona correctamente, el pedal de freno está muy suave y es fácil pisarlo hasta el fondo, sin tener que ejercer una presión muy elevada.
La razón de que esto ocurra es un problema en la válvula anti retorno, y nuestro consejo es que en ese caso, lleves tu coche al taller cuanto antes.
Pasos para sustituir el servofreno
Retirada del servofreno estropeado
· Estaciona el coche en lugar seguro y con suficiente espacio para trabajar.
· Busca la varilla de empuje de refuerzo conectada al pedal de freno.
· Quita el pasado de chaveta que sujeta el pasador de la varilla de empuje del reforzador al pedal de freno utilizando unos alicates.
· Suelta el pasador de la varilla de empuje del pedal de freno y desliza la varilla de empuje hacia fuera del pedal de freno.
· Desatornilla las tueras de montaje de los espárragos del servofreno con un trinquete, una extensión de trinquete y un casquillo.
· Desconecta la manguera de vacío del servofreno.
· Quita las dos tuercas que sujetan el cilindro maestro del freno al servofreno.
· Separa el cilindro maestro del freno del reforzador para dejar espacio para extraer el reforzador.
· Saca el servofreno del cortafuegos y retíralo del coche.
Instalación del nuevo servofreno
· Coloca el nuevo amplificador deslizando la varilla de empuje y cuatro pernos de montaje.
· Desliza la brida del cilindro maestro del freno sobre los dos espárragos de montaje del servofreno.
· Pon las dos tuercas de montaje del cilindro maestreo del freno.
· Conecta la manguera de vacío al servofreno.
· Atornilla las cuatro tuercas de montaje al servofreno.
· Coloca la varilla de empuje del servofreno sobre el pedal de freno y desliza el pasador de la varilla de empuje.
· Instala el pasador de chaveta nuevo para asegurar la varilla de empuje de refuerzo al pedal de freno.
Con toda esta información, ya sabes cómo detectar una avería en el servofreno y cómo sustituirlo correctamente.