<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, encabezarán mañana miércoles, en Varsovia, las delegaciones que participarán en la XIV Cumbre bilateral entre España y Polonia, y que estará marcada por la situación que vive Ucrania.</strong></h4> Está previsto que en la Cumbre tomen parte <strong>una decena de ministros de ambos países</strong> que, en principio, según fuentes gubernamentales consultadas por<em> The Diplomat</em>, serán, por el lado español, los titulares de <strong>Asuntos Exteriores, José Manuel Albares; Defensa, Margarita Robles; Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto; Transportes, Movilidad y Agenda Urbana; Raquel Sánchez; e Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá</strong>. Todos ellos tendrán reuniones con sus homólogos polacos. Por su parte, los jefes de Gobierno mantendrán también un encuentro, en el que, previsiblemente uno de los asuntos a tratar será el de <strong>las repercusiones que para los países europeos está teniendo la invasión rusa de Ucrania.</strong> Polonia es uno de los países que se ve más afectado, especialmente por el problema migratorio provocado por la guerra. La frontera entre Ucrania y Polonia ha sido cruzada por cuatro millones y medio de ucranianos desde que comenzó el conflicto, aunque se estima que la mitad han regresado a su país y otros sean dirigido a distintos puntos de Europa. <strong>Las últimas estimaciones hablan de que habría en torno a 1.200.000 ucranianos refugiados en Polonia</strong>, un país que está haciendo un enorme esfuerzo para acoger a sus vecinos y que <strong>ha recibido los elogios de sus socios europeos, incluido los del Gobierno español</strong>. De hecho, Pedro Sánchez planeó viajar en abril a Varsovia para expresar ese agradecimiento de forma personal a Morawiecki, con quien mantiene una buena relación personal, a pesar de las diferencias de planteamientos ideológicos de ambos líderes. Sánchez no pudo viajar a Polonia entonces, porque tuvo que permanecer en España para estar presente en la votación en el Congreso de los Diputados del decreto de medidas anticrisis, y finalmente, decidió posponer su viaje hasta la celebración de esta Cumbre. La Cumbre es <strong>continuación de la mantenida en mayo del año pasado, en Alcalá de Henares</strong>, aunque entonces, el escenario geopolítico y la situación económica eran muy distintos a los actuales. Entonces, los dos jefes de Gobierno acercaron posiciones ante el problema migratorio de la Unión Europea y defendieron más fondos comunitarios tanto para la vecindad sur como para la este. Ahora, la solidaridad con Ucrania y las consecuencias económicas de la invasión rusa, con la vista puesta en el abastecimiento energético de Europa, estarán muy presentes en los encuentros, tanto de Sánchez con Morawiecki, como de los ministros con sus homólogos. España y Polonia son países con una extensión y una población similares, lo que les hace compartir objetivos en muchos casos en la Unión Europea. Y <strong>en el terreno bilateral, las relaciones económicas no han hecho más que crecer</strong>, hasta el punto de que Polonia es el socio principal de España en Europa Oriental y España está entre los diez primeros clientes de Polonia. El flujo del comercio bilateral se sitúa en torno a los 14.000 millones de euros y las empresas españolas están presentes en Polonia en los sectores de infraestructuras, transporte, automoción y banca, entre otros. Las autoridades polacas están inmersas en un plan de mejoras de sus infraestructuras con fondos europeos, un asunto en el que la experiencia española y la capacidad de nuestras empresas les resulta muy interesante. Un asunto delicado en la relación bilateral es <strong>la situación del periodista español Pablo González,</strong> que lleva cinco meses detenido en Polonia, tras ser arrestado en una zona cercana a la frontera con Ucrania, acusado de un delito de espionaje.