<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>Las importaciones españolas de gas procedentes de Rusia superaron el pasado mes de junio a las de Argelia por primera vez en la historia, un dato que, si bien coincide con el deterioro de las relaciones de Madrid con Argel a causa de su cambio de rumbo respecto al Sáhara Occidental, también coincide con los intentos de aislamiento internacional de Moscú, incluido el energético, a causa de la invasión de Ucrania.</strong></h4> De acuerdo con los últimos datos del <strong>Boletín Estadístico de Enagás</strong>, España compró en junio 7.763 gigavatios hora (GWh) de gas a <strong>Argelia</strong>, 7.345 de los cuales llegaron por oleoducto (Medgaz) y el resto (418) en buques metaneros en forma de gas natural licuado (GNL). Con estas cifras, Argelia representó el 21,6% del gas adquirido por nuestro país en junio de 2022. En junio de 2021, España compró 18.123 GWh de gas a Argelia. Eso representa <strong>un descenso de casi el 60% en solo un año</strong>. Entre enero y junio, el gas procedente de Argelia supuso el 24,7% de las importaciones españolas de este producto. En el mismo periodo de 2021, el porcentaje fue muy superior, el 47,7%. Argelia, que llegó a tener una cuota superior al 50%, ha exigido a España una renegociación al alza de los precios de los contratos con Naturgy y otras empresas. En el mismo mes de junio de 2022, España compró 8.752 gigavatios hora a <strong>Rusia</strong> (todos por vía marítima), lo que representó el 24,4% de todos los suministros de gas a España. En junio de 2021, cuando todavía se estaba lejos, siquiera, de esperar una invasión rusa en Ucrania, la cantidad fue de 2.163 GWh. Por tanto, no es solo la primera vez que Rusia adelanta a Argelia como suministradora de gas a España, sino que el aumento del pasado mes de junio eleva al 10,1% la cantidad acumulada desde enero, un porcentaje nunca alcanzado anteriormente. En términos interanuales, ello supone un incremento del 3,2% (22.236 GWh en la primera mitad de 2021 y 22.948 en el primer semestre de 2022, con la guerra ya en marcha). En este mismo periodo, <strong>Estados Unidos</strong> también adelantó a Argelia como proveedor de gas a España, con 10.618 GWh en junio (el 29,6%), muy por encima del país norteafricano (el suministrador histórico de gas a España), pero <strong>solo un poco por encima de Rusia, que se ha convertido en el segundo suministrador.</strong> En junio de 2021, EEUU vendió 4.602 gigavatios hora a España. Todos estos datos coinciden con <strong>un gravísimo deterioro diplomático entre España y Argelia tras la decisión del Gobierno de Pedro Sánchez de reconocer el plan marroquí de autonomía para el Sáhara Occidental</strong>, que aunque ha permitido reflotar las relaciones con Rabat, lo ha hecho a costa de las relaciones con Argel. Esta situación se ha traducido en la decisión argelina de suspender el Tratado de Amistad, Buena Vecindad y Cooperación y en posibles amenazas a las transacciones financieras con España, lo que ha llevado al ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, a denunciar estas medidas ante la Comisión Europea. No obstante, <strong>Argelia ha insistido en todo momento en que cumplirá sus “obligaciones contractuales” para el suministro de gas a España.</strong> El pasado 30 de junio, Albares declaró a Radio Nacional que, según los datos de la Secretaría de Estado de Comercio, y “a pesar de las declaraciones argelinas diciendo que eran fantasías malintencionadas por parte de España, efectivamente hay un bloqueo de las operaciones” comerciales y empresariales por parte de Argelia. Por otra parte, <strong>el Consejo Europeo extraordinario, celebrado en Bruselas los días 30 y 31 de mayo, aprobó el sexto paquete de sanciones contra Rusia, en virtud del cual los Estados miembros se comprometen a boicotear las importaciones de petróleo y de productos petrolíferos “suministrados desde Rusia a los Estados miembros” por vía marítima</strong>, una medida que “cubre inmediatamente más de dos tercios de las importaciones de petróleo de Rusia, cortando una enorme fuente de financiación para su maquinaria de guerra”, y que se debería poner en marcha en un plazo de entre seis y ocho meses. Durante los debates de Bruselas, <strong>España y Portugal insistieron reiteradamente en que el <em>hub</em> ibérico puede ser una alternativa a la dependencia energética de Rusia</strong> porque los dos países cuentan con diez plantas de regasificación que representan más de la mitad de la capacidad de regasificación de Europa.