<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El PP advirtió ayer al Gobierno de que antes de apoyar el aumento del gasto en Defensa y de la presencia militar de Estados Unidos, quiere que Pedro Sánchez les dé explicaciones y reclama una postura unida del Ejecutivo de coalición entre PSOE y Podemos.</strong></h4> Ayer, <strong>el vicesecretario de Institucional del PP, Esteban González Pons</strong>, emplazó al presidente del Gobierno a que llame al principal partido de la oposición y le explique la "letra pequeña" del acuerdo alcanzado con el presidente estadounidense, Joe Biden, y de donde piensa sacar el dinero para aumentar el presupuesto de Defensa. <strong>“Nos tendrán que llamar si quieren algo”,</strong> dijo González Pons en declaraciones a Telecinco, precisando que la llamada que recibió de la ministra de Defensa, Margarita Robles, el pasado miércoles fue para contarle lo que "ya ponía en los periódicos”. Tras asegurar que no conocen la "letra pequeña" del acuerdo con Estados Unidos, pidió sabe<strong>r “qué es lo que el Gobierno ha comprometido con el Gobierno norteamericano y de donde va a sacar el dinero para pagar los 12.000 millones de euros adicionales"</strong> porque, según sus cálculos, son unos 1.500 millones cada año y ese dinero hay que "quitarlo" de otra parte. González Pons cree que ni siquiera el Ejecutivo "sabe a estas alturas qué es lo que los norteamericanos quieren ampliar en la base de Rota, más allá de los destructores", pero que debe informar a la oposición si quiere su apoyo. "¿Cree que nosotros podemos votar a ciegas?", se preguntó. En cuanto al incremento del gasto militar subrayó que el PP es un partido "atlantista" y "partidario de la OTAN", pero insistió en que quiere saber de dónde "va a sacar el dinero" Sánchez porque también son una formación "que se preocupa por las necesidades de los españoles en una época de inflación". "Explíquenoslo si quiere que le apoyemos", reiteró. El dirigente del PP <strong>aprovechó para ahondar en la herida de la división en el seno del Gobierno de PSOE y Podemos</strong>, indicando que “para hablar de posición de Estado, lo mínimo es que los dos miembros del gobierno de coalición estén de acuerdo”. Añadió que si el Ejecutivo les ofrece u<strong>na posición "coherente, unida y pactada por los miembros del Gobierno"</strong> estarán hablando de "una decisión de Estado", pero que, si se presenta "dividido" y Sánchez "busca" los votos del PP para "salvarse", estarán hablando de "una posición de Gobierno". Ayer, <strong>el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares,</strong> afirmó en TVE que espera que haya margen para <strong>que sus socios de Unidas Podemos reflexionen</strong> sobre la necesidad de incrementar el gasto en Defensa. "En todas las fuerzas progresistas, la seña de identidad es la protección de nuestros ciudadanos y, dentro de ellos los más vulnerables. La inseguridad siempre golpea desproporcionalmente al más vulnerable y al más débil", enfatizó. Por su parte<strong>, la ministra de Defensa, Margarita Robles</strong>, pidió, en un claro mensaje a Podemos que el aumento del gasto en Defensa se analice sin "prejuicios", ya que sin seguridad no hay libertad ni los ciudadanos pueden disfrutar de servicios como la educación o la sanidad. <strong>"No es una realidad de flores y de paz, es una realidad muy dura"</strong>, afirmó en una entrevista en La Sexta, donde, en relación con unas palabras de <strong>la ministra de Derechos Sociales y líder de Podemos, Ione Belarra</strong>, criticó que se contraponga el gasto en defensa con la sanidad o la educación y recordó que los niños de Ucrania o de muchos países de África no tienen acceso a estos servicios. “Que pregunte a los niños de Ucrania”, dijo, dirigiéndose a su compañera de gabinete. <strong>De la posición de Podemos se desmarcó ayer el ministro de Universidades, Joan Subirats, de En Comú</strong>, quien, en una entrevista en La 2 y Ràdio 4 <strong>consideró "justificado" asumir más costes militares ante el aumento de las amenazas y riesgos internacionales</strong> que a su juicio conlleva la guerra de Ucrania. No obstante, no precisó si el objetivo concreto de gasto del 2% del PIB en defensa es o no adecuado. "La situación hipotética de que la defensa de Europa y los valores occidentales estaba en manos de los Estados Unidos y la defensa de los países europeos podíamos mantenernos tranquilos sin preocuparnos de la defensa ha quedado bastante desmontada”, afirmó. El ministro cree que "no está sobre la mesa que haya un debate sobre si España permanece en la OTAN o no", y señaló que, si bien en el referéndum de 1986 votó en contra, ahora tendría que volverlo a pensar.