The Diplomat
La ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, afirmó ayer que el Gobierno no descarta que en un futuro la vacuna rusa Sputnik contra el COVID-19 pueda ser utilizada en la Unión Europea y, con ello, en España.
En una entrevista concedida a La Sexta, González Laya recordó que son las instituciones comunitarias las que se encargan de verificar que se cumplen «los requisitos médicos de eficacia y eficiencia» y apuntó a que si un productor es «capaz de desarrollar una vacuna que cumpla esos requisitos» entonces esta podría entrar en el mercado comunitario.
La ministra insistió en que es una decisión que compete a la Agencia Europea del Medicamento, y subrayó que, en todo caso lo importante es garantizar que las vacunas que llegan a los ciudadanos europeos y españoles «sean eficaces para protegerles del virus y que a través de esa inmunización podamos controlar la escalada en los contagios».
Además, González Laya adelantó que el Ejecutivo sopesa adoptar en los próximos días medidas para frenar la llegada a España de nuevas cepas del coronavirus que están apareciendo en otros países como Brasil o Sudáfrica, después de que ya se hiciera lo propio con Reino Unido, con el que están suspendidas las conexiones aéreas y marítimas.
También manifestó que en Europa se tiene la «idea clara» de que hay que evitar un cierre de fronteras dentro del espacio Schengen como ocurrió durante la primera ola pero al mismo tiempo tiene claro que para controlar la expansión del virus “tenemos que ir también restringiendo la movilidad dentro del espacio europeo».
Así, se refirió en el caso de España a las limitaciones en la movilidad tanto con Portugal como con Francia. «Sabemos que esto no gusta a nuestros ciudadanos, sobre todo a los que viven en zonas fronterizas, entendemos su desasosiego pero les pedimos que nos ayuden con su comportamiento responsable y su paciencia para que juntos podamos controlar la expansión de esta pandemia», dijo.