Eduardo González
La ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, admitió ayer que el acuerdo de asilo y migración presentado la semana pasada por la Comisión Europea “se queda corto” respecto a las prioridades de España en esta materia.
“La posición de España es que el pacto que está sobre la mesa es el punto a partir del cual vamos a sentarnos a negociar”, declaró la ministra ante los periodistas españoles durante su visita oficial a Chipre. “Lo que España va a buscar es impulsar una migración ordenada dentro de la Unión Europea, y ese es uno de los ángulos fundamentales de la postura española”, prosiguió.
Aparte, “vamos a buscar también que Europa tenga tolerancia cero con las mafias criminales que trafican con personas, vamos a impulsar una mejora y una profundización de las relaciones de los países europeos con los países de origen y tránsito, es algo en lo que España se ve como un modelo, y vamos también a impulsar que se construyan procedimientos que respeten el espíritu y la letra de los acuerdos internacionales de los que España es parte en materia de refugio y asilo”, precisó, sin hacer ninguna mención al sistema de cuotas obligatorias para la distribución de refugiados, que pretendía conseguir el Gobierno español y que no figura en las propuestas de Bruselas.
“Estas son las bases fundamentales sobre las que se va a asentar la posición española” pero, “evidentemente, todo esto es una discusión”, continuó González Layas. No obstante, el acuerdo propuesto por Bruselas “se queda corto en estas materias y por eso estas son las materias en las que queremos incidir durante esta negociación”, admitió la ministra en su primera valoración pública sobre la propuesta de la Comisión Europea.