Eduardo González
El gobernador adjunto de la Región de Moscú, Vadim Jromov, afirmó ayer, en declaraciones exclusivas a The Diplomat, que existen varios ámbitos de cooperación entre Rusia y España “muy ampliamente favorables a ambas” y aseguró que los inversores españoles en su provincia tienen plenamente garantizados sus derechos a pesar de las sanciones europeas a Rusia por su papel en la crisis de Ucrania.
Jormov y el viceministro de Inversión e Innovación, del Gobierno de la Región de Moscú, Antón Loguinov, visitaron ayer la sede de la CEOE en Madrid para exponer las oportunidades de negocios que se ofrecen para las empresas españolas y para mantener reuniones individuales con representantes de empresas españolas.
Previamente a este encuentro, los representes rusos protagonizaron un encuentro con empresarios en el que la presidenta de CEOE internacional, Marta Blanco, afirmó que “Rusia es un país prioritario” tanto para el Gobierno como para las empresas españolas y el ministro consejero de la Embajada rusa, Dimitry Sokolov, declaró que la Región de Moscú es “una de las provincias más pujantes de Rusia” y ha lanzado varias iniciativas para estimular las inversiones extranjeras directas, como “unas zonas económicas especiales en las que los inversores extranjeros tienen los mismos derechos que los nacionales”.
The Diplomat: ¿Qué valor añadido pueden aportar las empresas españolas en la Región de Moscú?
Vadim Jromov : Actualmente hay trabajando numerosas compañías de capital español en la Región de Moscú y, a pesar de las dificultades políticas, no solamente no se han ido sino que siguen ampliando sus negocios año tras año. Aparte, ha cambiado el panorama en el mercado mundial y las compañías tienen que ampliar sus zonas de actuación a otros ámbitos. Por ejemplo, Mercedes Benz se ha implantado este año en la Región de Moscú, pero no se producen accesorios y no hay piezas de repuesto suficientes para estos automóviles. Por el contrario, en la Comunidad de Madrid hay varios clústeres industriales en los que sí se producen, por lo que la cooperación en este tipo de industria puede ser sumamente importante.
Otro sector interesante es la producción farmacéutica. Moscú, tradicionalmente, es un productor líder que genera una cuarta parte de la producción farmacéutica de todo el país, pero el resto del mundo, y España en concreto, producen mucho más y para que nuestros habitantes puedan acceder a los nuevos medicamentos en el mercado sería interesante que se establecieran en el mercado ruso las compañías farmacéuticas españolas, con su capacidad productiva.
Por supuesto, la alimentación es un sector que está creciendo por toda Rusia y por la Región de Moscú y tenemos ahí un buen ejemplo de cooperación positiva con compañías españolas. Existe un mercado de consumidores en el centro de Rusia de 80 millones de personas y esto, junto con la posibilidad de mandar mercancías en tiempo breve por ferrocarril al Extremo Oriente y China, aumenta las posibilidades y la capacidad de expandir nuestros mercados. La Región de Moscú puede ser una puerta de entrada para los productos españoles hacia China. Por tanto, vemos varios posibles ámbitos de cooperación entre Rusia y España muy ampliamente favorables a ambas.
TD: ¿Ha conseguido resultados concretos durante los encuentros que ha mantenido en Madrid con empresarios españoles?
VJ: Sí, acabamos justamente de tener un encuentro con un fabricante de piezas de automóviles que está considerando muy seriamente establecerse en territorio ruso. También hemos percibido interés en el ámbito farmacéutico y ha habido otro encuentro con una empresa de productos de materiales de construcción, un sector en el que colaboramos desde hace tiempo con compañías españolas, como URSA, instalada en la Región de Rostov desde 2000.
TD: ¿Las empresas españolas de infraestructuras tienen también posibilidades en Rusia?
VJ: Desde luego. Tenemos grandes proyectos de autopistas o de modernización de viviendas y estamos dispuestos a dar la bienvenida a las compañías españolas que quieran participar en proyectos en los alrededores de nuestro territorio, como el proyecto de construcción del tren ligero, que une a las urbanizaciones de los alrededores de Moscú. De todos modos, hoy (por ayer) no nos hemos reunido con este tipo de empresas, pero sí hay mucho interés.
TD: La UE renovó en junio las sanciones a Rusia y el actual ministro español de Asuntos Exteriores en funciones y futuro jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, es partidario de que se mantengan. ¿Cómo puede afectar esta circunstancia a su intento de atraer a las empresas españolas?
VJ: Desde el punto de vista del desarrollo económico, nosotros somos socios de todas las compañías que estén de acuerdo en trabajar en la región y apoyaremos sus proyectos de negocio. Nosotros no dividimos a los inversores entre rusos y extranjeros, son inversores, y punto. Lo que hacemos es construir relaciones societarias responsables y de mutuo interés entre empresas y autoridades y puedo asegurar que los inversores españoles en nuestro territorio nunca verán mermados sus derechos y recibirán todo el apoyo necesario. En cuanto a la influencia de las sanciones comerciales, los políticos europeos tienen derecho, por supuesto, a tomar estas decisiones, pero consideramos que el mundo de los negocios no tiene nada que ver con las sanciones y seguiremos apoyando las relaciones de amistad entre España y Rusia, que ya tienen cientos de años y no van a cambiar por unas decisiones particulares tomadas en un momento dado, aunque, por supuesto, esperamos que los europeos cambien estas decisiones.
TD: ¿Cómo están las relaciones económicas con España en comparación con otros países europeos?
VJ: Nuestras relaciones con España son susceptibles de ampliarse. Tenemos más relaciones de cooperación con Italia, Alemania, Austria y República Checa y una actividad muy potente con Francia. La acogida que hemos tenido hoy (por ayer) nos indica que hemos prestado una atención insuficiente a esta relación con un país amigo como España.