<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>La secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez, aseguró ayer que el acuerdo entre Mercosur y la UE supone un “paso adelante en favor del libre comercio” en un “momento crítico para el comercio internacional” y se mostró confiada en que será finalmente ratificado por todos los Estados implicados, independientemente de las coyunturas políticas y las “exageraciones electorales”.</strong></h4> “Se trata de un acuerdo de libre comercio de última generación que permitirá acceder a un mercado conjunto de 800 millones de consumidores, que ofrece grandes ventajas comerciales y que incluye, como novedad muy destacable, un capítulo de desarrollo sostenible”, declaró Méndez durante su participación en el debate <strong><em>Pasado, presente y futuro del Tratado de Asociación UE-Mercosur</em>, organizado por el Real Instituto Elcano y la Fundación Botín en Madrid.</strong> El acuerdo, que fue firmado el pasado 28 de junio en los márgenes de la cumbre del G20 en Osaka (Japón) tras veinte años de negociaciones, <strong>“manda un mensaje al mundo en un momento crítico para el comercial internacional, que hace necesario para dar un paso adelante en favor del libre comercio basado en reglas”</strong>, prosiguió. “El papel de España ha sido muy relevante” para conseguir la aprobación de un texto que “supone una gran oportunidad para las empresas españolas", agregó. Según Xiana Méndez, el acuerdo ayudará a derribar las “altas barreras arancelarias” de los países del Mercosur y “permitirá al conjunto de empresas de la UE ahorrar 4.000 millones de euros anuales en aranceles”. <strong>“Para las empresas españolas, el ahorro será de 500 millones de euros anuales e incluso permitirá duplicar las exportaciones españolas en cinco años”</strong>, añadió. Por otra parte, según Méndez, el acuerdo “permitirá a las empresas europeas y españolas el <strong>acceso preferente un mercado de contratación pública muy dinámico</strong>” y garantiza “suficientemente” los intereses agrarios de la UE, una “materia siempre muy sensible durante el proceso negociador”. A juicio de la secretaria de Estado, el <strong>capítulo de desarrollo sostenible</strong> no sólo permitirá promocionar “buenas prácticas” en materia de medio ambiente, derechos de los trabajadores y cumplimiento de los Acuerdos de París contra el cambio climático, sino que también afectará a “la competencia leal”. “Lo que vamos a exigir a nuestras empresas es lo que vamos a exigir a las empresas de los países socios”, por lo que, al mismo tiempo que defiende el desarrollo sostenible, este capítulo ayudará a “asegurar el cumplimiento” de los términos puramente comerciales del acuerdo. En cuanto a los próximos pasos, el acuerdo aún deberá ser firmado por el Consejo y ratificado por el Parlamento Europeo y por cada Parlamento nacional , tanto de la UE como de Mercosur, “aunque el Consejo puede decidir su entrada en vigor de forma provisional cuando lo ratifique el Parlamento Europeo”, explicó. “Si no lo ratifican todos los Parlamentos, se debería hacer algún tipo de revisión o renegociar el acuerdo, pero no hay precedentes y no creo que sea así”, agregó. Al respecto, Xiana Méndez se mostró convencida de que la coyuntura política interna de los países (con unas posible victoria de la izquierda kirchnerista en las elecciones presidenciales en Argentina del 27 de octubre y la amenaza del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, de abandonar el Mercosur en tal caso) no afectará a la ratificación de este acuerdo que “es muy beneficioso para la UE y el Mercosur”. “<strong>El acuerdo no lo firman Gobiernos, lo firman Estados</strong>”, advirtió.<strong> “Yo no daría tanta importancia a las coyunturas políticas ni a las exageraciones electorales, y confío en que se ratificará en el plazo”</strong>, concluyó.
