El ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo./ Foto: Gobierno de Gibraltar
The Diplomat. 07/10/2016
El ministro Principal de Gibraltar, Fabian Picardo, aseguró ayer, en respuesta a unas declaraciones del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, que la bandera española «nunca» ondeará en Gibraltar, que «nunca será español, ni en cuatro años, 40, 400 ni 4.000, ni en ningún otro momento en el futuro».
«Nunca significa nunca, no significa no. El Brexit no cambia nada», dijo Picardo en una rueda de prensa en el Peñón, en la que acusó a España de mantener «una política de amenazas, hostilidad abierta y confrontación contra Gibraltar, en vez de mostrar voluntad de diálogo y cooperación».
Según el ministro principal, García-Margallo relaciona la salida del Reino Unido de la UE con la soberanía de Gibraltar “en un descarado intento de aprovechar el Brexit para avanzar en la obsoleta e inválida pretensión de España». “La a idea de volver a trazar las fronteras de Europa y establecerlas donde se encontraban en 1713 es francamente absurda», indicó.
Picardo añadió que Gibraltar da empleo a miles de ciudadanos españoles, contribuye a un cuarto del PIB de la zona y es el segundo empleador más importante de Andalucía, por lo que -dijo- «las ventajas económicas que Margallo ha descrito en el marco de una soberanía conjunta podrían disfrutarse hoy mismo con una relación transfronteriza normal y amistosa». «No hay necesidad de compartir la soberanía para que reine la normalidad», enfatizó.
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El ministro principal dice que las ventajas de la cosoberanía se pueden disfrutar hoy con una relación amistosa
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Asimismo, manifestó que «Las amenazas de Margallo acerca del cierre de la frontera son propias de los tiempos de la Guerra Fría, no de la Europa moderna. Está construyendo castillos en el aire y evitando las cuestiones de interés real con las que debe lidiarse».
El jefe del Gobierno gibraltareño subrayó que ya se han enfrentado a una larga lista de ministros de Asuntos Exteriores españoles que buscaban, todos ellos, recuperar la soberanía española sobre Gibraltar. Y agregó: «Margallo simplemente será uno más de una larga lista».
Por último, se dirigió a «a aquellos que viven en España y trabajan en Gibraltar, a aquellos que visitan el Peñón con frecuencia y a las familias repartidas a ambos lados de la frontera», para asegurarles que «el Gobierno de Gibraltar nunca será el que imponga barreras a la libre circulación, nunca pondrá en peligro vuestra capacidad de llevar a cabo actividades comerciales transfronterizas o de ver a amigos y familiares al otro lado de la frontera». «Pero nunca pagará el precio de la soberanía para nada de ello», recalcó.