Residencia del Embajador de España en Washington.
The Diplomat. 30/06/2016
Duro revés judicial para el Ministerio de Asuntos Exteriores. La Audiencia Nacional anuló ayer por prescripción la resolución del departamento de José Manuel García-Margallo por la que el arquitecto Rafael Moneo debía indemnizar al Estado con más dos millones de euros por las deficiencias en las obras en la residencia de la Embajada española en Washington.
Los magistrados admitieron el recurso de Moneo y anularon la resolución dictada en junio de 2013 por el entonces subsecretario de Asuntos Exteriores y Cooperación, Rafael Mendívil, en la que se le obligaba a indemnizar al Estado con 2.059.143,91 euros en concepto de indemnización por los daños derivados de las obras de remodelación en la residencia.
El tribunal consideró que se había excedido “con creces” el plazo de cinco años que tenía Exteriores para reclamarle algo al arquitecto. Los “vicios ruinógenos” se apreciaron por primera vez el 24 de abril de 2003, por lo que el plazo finalizó en abril de 2008 y no en junio de 2013 como alegaba Exteriores.
La resolución también analizó si existieron actuaciones que interrumpieran el plazo prescriptivo –tal y como alegaba Exteriores- y recuerda que hubo cartas dirigidas al Ministerio, en mayo y diciembre de 2008, en las que Moneo resumía las deficiencias y el modo de solucionarlas, así como la carta de respuesta en enero de 2009 y también un proyecto de mejora de la residencia que fue presentado en diciembre de 2009.
La Audiencia Nacional consideró, sin embargo, que tales comunicaciones “no pueden tener la virtualidad interruptiva”, puesto que tuvieron lugar cuando había transcurrido el plazo de cinco años y en ellos “no cabe ver algún requerimiento, reclamación o atribución de responsabilidades al sr. Moneo, ni tampoco la asunción por parte de éste respecto de los vicios constructivos”.
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La obra en la residencia costó 8,7 millones de euros al erario público y fue inaugurada por Aznar en 2004
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“En definitiva no se ha producido, dentro del plazo prescriptivo, ninguna actuación de la Administración, con conocimiento del interesado actor del proceso que nos ocupa, que fuese idónea para interrumpir la prescripción en ese periodo de tiempo”, concluyeron los magistrados de la Audiencia Nacional. En todo caso, la sentencia es recurrible ante el Tribunal Supremo.
El edificio fue inaugurado en 2004 por el expresidente José María Aznar. Tiene una superficie construida de 1.853 metros cuadrados, sobre un terreno de 10.300 metros cuadrados. Las obras de Moneo costaron 8,7 millones de euros al erario público, pero al poco tiempo aparecieron los primeros desperfectos por culpa del ladrillo elegido, que no aguantó las condiciones climáticas de humedad y frío en la capital de EEUU.
