The Diplomat in Spain

Foto: antena3.com

Tamara Fariñas. 27/04/2016

Se estrenó este lunes y lo hizo por la puerta grande: con más de cuatro millones de espectadores (un 22,5% de ‘share’). ‘La Embajada’ se convirtió en el estreno más visto de la temporada de Antena3, y en el colectivo diplomático ha producido opiniones diversas, desde quienes le reprochan que no se ajusta a la realidad, a quienes asumen que se trata de una ficción y lo ven como una oportunidad para difundir el trabajo de los diplomáticos.

En la serie, Luis Salinas es el nuevo embajador español en Tailandia. Se traslada con su familia a la capital, Bangkok, donde su esposa inicia un romance con el secretario de su marido mientras su hija se enamora de un familiar de su rival dentro de la Embajada.  Amador Martínez Morcillo, embajador de España y autor de Los diplomáticos y el cine, ya criticaba en su momento la «injusticia» que sufre la figura del diplomático en el cine. Ahora, en la pequeña pantalla, algunos miembros de la Carrera Diplomático se suman a esta crítica.

Diplomáticos, como Carlos Westendorp o Inocencio Arias reconocen no haber seguido el estreno, aunque aseguran que, por los comentarios que han recibido, ni siquiera la verán en un futuro. «Dos compañeros, uno de ellos diplomático, me han dicho que falta a la realidad«, asegura Arias.

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La ADE asume que se trata de una ficción y hará vídeos en Antena 3 para explicar la realidad de las Embajadas

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Sin embargo, la Asociación de Diplomáticos Españoles (ADE) saluda, en una nota colgada en su página web, el lanzamiento de la serie y ve en ella una oportunidad para que aumente el interés por la profesión de diplomáticos. Además, informa de que ha acordado con Antena 3 la realización de una serie de vídeos en los que, capítulo a capítulo, se mostrará la realidad de las legaciones diplomáticas y consulares españolas.

“La trama -reconoce la nota- tiene lugar ahora en una Embajada como antes lo ha tenido en comisarías, hospitales, redacciones de periódico o ayuntamientos.

Desde la productora, se indica que la idea de La Embajada no era hacer una serie sobre diplomacia, sino «contar el fenómeno de la corrupción, que por desgracia ha invadido la vida pública», pero «desde una embajada, situada lejos de nuestro país». Carlos López, guionista y productor ejecutivo de la serie, asegura a The Diplomat que se trata de «una pura invención y la trama sigue los dictados de la ficción», aunque su intención era mostrar «un reflejo de lo que aparece todos los días en las portadas de los periódicos».

López afirma que contactaron con «algunos diplomáticos» y contaron con la colaboración de la ADE «para entender el funcionamiento de una embajada. «Nos hemos acercado a la profesión con todo el respeto, aunque tradicionalmente ninguna profesión se ha sentido bien reflejada en una ficción televisiva», sostiene.