El ministro de Exteriores, en una imagen de archivo./ Foto: GP/La Razón
The Diplomat. Madrid
El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, abogó el lunes ante su homólogo de Arabia Saudí, Adel al Jubeir, con quien se reunió en Nueva York, por la necesidad de encontrar salidas negociadas a los conflictos en Siria y Yemen.
El ministro, que está manteniendo numerosos contactos en los márgenes de la Asamblea General de Naciones Unidas, habló con Al Jubeir, de las distintas iniciativas para tratar de resolver el conflicto en Siria, que está siendo el tema estrella en el 70 periodo de sesiones y en las reuniones del Consejo de Seguridad, del que España forma parte.
Margallo y Al Jubeir coincidieron, según una nota del Ministerio de Asuntos Exteriores, en exigir una salida política negociada sobre la base del Comunicado de Ginebra de 2012, acordado por Estados Unidos y Rusia y con el visto bueno de la ONU. Para el ministro español, es necesario cumplir con urgencia ese acuerdo para poder fin al «tremendo drama humanitario» que está sufriendo la población siria.
Con respecto a Yemen, los dos ministros se refirieron a las «graves consecuencias humanitarias» de las actuales acciones bélicas y a la necesidad de abrir una vía consolidada al diálogo político asentada en las resoluciones del Consejo de Seguridad. Arabia Saudí, donde hay una mayoría suní, se encuentra especialmente involucrada en el conflicto en Yemen, después de que liderara una coalición militar para frenar a los rebeldes hutíes, de confesión chií, y por ello próximos a Irán, el tradicional adversario de los saudíes en la región.
En la conversación estuvieron presentes otros asuntos que afectan a la seguridad en Oriente Próximo, como el acuerdo alcanzado por las potencias occidentales con el régimen de Teherán y su cumplimiento. España preside, dentro del Consejo de Seguridad, el Comité de Sanciones contra Irán, por lo que vigila muy de cerca ese cumplimiento.
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En el marco bilateral los ministros subrayaron el aumento de las relaciones económicas bilaterales y de las inversiones de empresas españolas en el desarrollo de proyectos de infraestructuras en el reino saudí.
Por otro lado, García-Margallo se reunió con el secretario general de la Liga Árabe, Nabil el Araby, con quien habló de Siria y del conflicto palestino-israelí, así como de la situación en Libia. En este punto, El Araby reconoció la labor y esfuerzo del representante especial de Naciones Unidas para Libia, el español Bernardino León, para alcanzar un acuerdo que permita sentar las bases de la paz y estabilidad en el país.