El Diablo Cojuelo, personaje del Carnaval dominicano./ Foto: JDL
Juan D. Latorre. Madrid
El embajador de la República Dominicana, Aníbal de Castro, y la representante del Ministerio de Turismo en España, Isabel Vásquez, presentaron el jueves en el Casino Gran Vía de Madrid ante un centenar de invitados del sector turístico y la vida política dominicana una espectacular noche de gastronomía, música, ron y carnaval.
La degustación gastronómica fue realizada por la prestigiosa chef dominicana Esperanza Lithgow. Para cerrar esta Noche Dominicana, la fiesta fue amenizada por el grupo musical Selección, que con su ritmo caribeño sedujo a los asistentes y salieron a bailar para disfrutar de la música y la compañía.
Tras señalar que el turismo extranjero se había incrementado un 10% el año pasado en la República Dominicana, el embajador Aníbal de Castro dijo que ese éxito “en gran parte se debe a ustedes, por tener a España acompañándonos en esta actividad económica desde el principio, de la que hemos aprendido a sacar provecho de nuestras ventajas naturales. Son las inversiones españolas las de más importancia en nuestro país, con un capital que asciende al 65 % de la inversión turística”.
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«Más de cien mil españoles escogen República Dominicana como destino cada año»
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El diplomático recordó que, como bien saben los más de 100.000 españoles que cada año escogen República Dominicana como destino de sus vacaciones, esta bonita isla «es un paraíso de sensaciones, por encima de otros destinos del Caribe, en busca de tranquilidad y descanso, pero también de aventura, deporte e historia».
A sus playas de ensueño, como las de Punta Cana y Samaná, o las más salvajes de Cabarete o Barahona, ideales para practicar surf y kite-surf, hay que añadir su gastronomía, distinguida por sus excelentes materias primas. La cocina dominicana destaca por la fusión de las culturas española y africana que se han asentado a lo largo de la historia en la isla caribeña, y han evolucionado a lo largo del tiempo, haciendo del país un destino idóneo para todo tipo de paladares. Como dice su eslogan turístico, “República Dominicana, lo tiene todo”.