Sí el Reino Unido abandona la UE, las consecuencias serían nefastas para Gibraltar.
The Diplomat. Madrid
Los ciudadanos de Gibraltar podrán participar en el referéndum sobre la permanencia o no del Reino Unido en la Unión Europea, que el Gobierno británico pretende celebrar en 2017 o, si es posible, en 2016.
Así lo ha confirmado el primer ministro, David Cameron, para alivio de las autoridades del Peñón, que temen las consecuencias de una salida de la UE.
Una nota del Gobierno gibraltareño señala que esa confirmación “se encuentra en línea con las garantías obtenidas anteriormente por el Ministro Principal de manos del Ministro británico para Europa, David Lidington, sobre las intenciones del Partido Conservador en caso de obtener mayoría absoluta en las elecciones generales del Reino Unido”.
Cameron anunció en las últimas horas que no podrán participar en el referéndum la mayoría de los residentes comunitarios en el Reino Unido, pero que sí podrán hacerlo los residentes en Gibraltar.
El ministro principal gibraltareño indicó, tras conocer la decisión de Cameron, que éste “ha cumplido su palabra frente al pueblo de Gibraltar”. Y agregó: “Como miembros británicos de la UE, nuestra voz se oirá gracias a nuestra participación en este ejercicio democrático fundamental. Estamos trabajando mano a mano con el primer ministro británico y su Gobierno para garantizar que Gibraltar cuente con el marco necesario para el referéndum sobre la UE al mismo tiempo que en el Reino Unido. Aguardamos con interés este importante debate”.
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El Peñón considera que la salida de la Unión Europea sería desastrosa para sus intereses
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Desde que Cameron expresó su intención de someter a referéndum de los británicos la continuidad en la UE, las autoridades gibraltareñas se han esforzado en poner de relieve que si el Reino Unido abandona el espacio comunitario, las consecuencias para el Peñón serían nefastas.
En un reciente artículo publicado en el diario bruselense “Político”, Picardo hablaba de “consecuencias desastrosas” para Gibraltar si dejaba de estar en la UE, tanto para su principal actividad económica, centrada en los servicios financieros, como en el plano político, ya que, en su opinión, quedarían a merced de España. Por ello, afirmaba: “»Gibraltar no es la única razón por la que el Reino Unido debería permanecer en la UE. Pero sí es una razón más».