The Diplomat. Madrid
La primera visita de Estado de Felipe VI al extranjero será a Francia la próxima semana, del 24 al 26 de marzo, y será recordada por su discurso ante la Asamblea francesa, una distinción que el país vecino tiene con muy pocos mandatarios. La Zarzuela y el Elíseo han estado negociando varios meses en este asunto, sobre todo para saber si los grupos parlamentarios tenían algún inconveniente con este evento en mitad de unas elecciones cantonales, ya que la primera vuelta de los comicios es el 22 de marzo y la segunda, el 29.
La intervención del Rey ante los diputados galos se producirá en francés, una lengua que el monarca entiende y habla perfectamente. Para Felipe VI será la segunda en repercusión mediática fuera de nuestras fronteras tras la que tuvo ante la Asamblea General de la ONU el pasado mes de septiembre.
Sólo dos españoles han hablado en la sede del Legislativo francés. Su padre, don Juan Carlos, lo hizo en 1993, aunque en aquella ocasión fue durante su tercera visita de Estado al Hexágono. El siguiente fue José Luis Rodríguez Zapatero, en 2005, después de que el líder socialista convergiera la política europea de España a la que defendían Jacques Chirac y Gerhard Schroeder. El discurso de Zapatero es recordado, sin embargo, por su deficiente pronunciación del francés.