El alcalde de Fuenlabrada y el presidente de Osetia del Norte desvelaron el busto de Mamsurov./ Fotos: A.R.
Alberto Rubio. Madrid
La figura de Hadji-Umar Mamsurov, el legendario general soviético que inspiró, entre otros, a Ernest Hemingway, para escribir su novela “Por quién doblan las campanas”, volvió a ser recordada esta semana en España, en concreto en Fuenlabrada (Madrid), donde desde el lunes tiene un memorial.
Con la presencia del viceministro de Exteriores de la Federación Rusa, Alexei Meshkov; del presidente de Osetia del Norte-Alania, Taymuraz Mamsurov; del embajador de Rusia, Yuri P. Korchagin, y del alcalde de Fuenlabrada, Manuel Robles, se descubrió el lunes el busto en homenaje al militar soviético en el Parque de la Solidaridad.
El embajador Korchagin subrayó el simbolismo de que el monumento se inaugure “en el 70º aniversario de la victoria en la II Guerra Mundial, en la hospitalaria tierra española” y recordó que la figura de aquel “coronel Xanti”, a pesar de sus gestas “era una persona común, que hablaba con todos”.
De izquierda a derecha, el embajador de Rusia, Yuri P. Korchagin; el alcalde de Fuenlabrada, Manuel Robles; el viceministro de Exteriores ruso, Alexei Meshkov; y el presidente de Osetia del Norte-Alania, Taymuraz Mamsurov (segundo por la derecha).
Mientras el viceministro de Exteriores ruso, Alexey Mishkov, destacó en su discurso que “si estamos unidos, nunca regresará el fascismo”, el presidente de Osetia del Norte-Alania, Taymuraz Mamsurov, rememoró que “aquellos oficiales jóvenes que vinieron a España estaban llenos de romanticismo” y explicó que “no pretendemos ahora juzgar quién tenía razón, sólo homenajear a la gente que luchó por la libertad de los pueblos”.
A la inauguración también asistieron medio centenar de personas, algunas de ellas portando banderas republicanas, que corearon el conocido “No pasarán” al finalizar el acto.
Hadji-Umar Mamsurov (1903-1968), nacido en Osetia, fue general y héroe de la Unión Soviética, condecorado tres veces con la Orden de Lenin. Pero en España, a dónde llegó bajo el camuflaje de un hombre de negocios macedonio, le llamaban “Xanti”, y por eso muchos le tomaron por vasco.
Durante la Guerra Civil española fue asesor del bando republicano, participó en la defensa de Madrid y organizó a los guerrilleros de la República. En la II Guerra Mundial creó las unidades “spetsnaz” (comandos) del espionaje militar soviético (GRU), luchó en la retaguardia alemana, liberó dos campos de concentración y fue condecorado como héroe de la Unión Soviética.