Participantes en el panel de Iberoamérica del Foro Davos de Madrid/. Foto: CEAL Ibérico
Julio García. Madrid
La época dorada de Iberoamérica de los primeros años del siglo XXI, con crecimientos económicos de hasta el 7%, quedó atrás con la crisis financiera global de 2007 y 2008, y ha dejado una clase media vulnerable y una sociedad cada vez más desigual.
Superar esta situación y atender a una ciudadanía que reivindica derechos en la calle, pasa por mejorar la calidad de la democracia, de la educación y del empleo; reforzar la alianza comercial entre los países Iberoamericanos; y diversificar las exportaciones. Así lo pusieron de manifiesto ayer los participantes en el panel “Claves para la transformación política, social y económica de Iberoamérica”, del Foro Davos Madrid.
Enrique V Iglesias, presidente de honor de CEAL Ibérico, dijo que la caída de la tasa de crecimiento en la región, junto con la demanda de China, requiere una serie de reformas para mejorar la calidad de la educación, ganar productividad e impulsar el mercado interno de la región, actualmente de tan solo un 1,9%.
Por su parte, el embajador de Colombia en España, Fernando Carrillo, apostó por combatir la desigualdad desde las instituciones políticas y crear un sistema de protección social. Se trata, dijo, de que los ciudadanos iberoamericanos pasen de “ingresos medios a clase media”. También abogó por pactos políticos para mejorar la educación, la sanidad, el empleo y las infraestructuras en Iberoamérica.
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Estados Unidos y Canadá deben integrarse a la región Iberoamericana, según Poveda
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En la misma línea de acometer reformas se pronunció la embajadora de México en España, Roberta Lajaus, y puso como ejemplo el esfuerzo de su país en poner en marcha medidas estructurales “para vencer las barreras de desigualdad y estancamiento económico”. Además, expresó el orgullo de México de formar parte de la Alianza del Pacífico, junto con Chile, Colombia y Perú, que han supuesto avances, como la reducción de aranceles, la eliminación de visas y la integración de bolsas de valores.
Finalmente, el director de Casa de América, Tomás Poveda, abogó por hacer de la región un lugar de oportunidades para empresas y emprendedores, mejorar la innovación tecnológica e integrar a Estados Unidos y Canadá en esta comunidad de países Iberoamericanos, que tienen “gran potencial”. En este sentido, también defendió el papel de España ante la Unión Europea, para que el viejo continente sea consciente de ese potencial de Latinoamérica.