Foto: A.R.
Carla María Rodríguez / Embajadora de Guatemala
Deja Madrid apenas dos años después de llegar. Su próximo destino, como representante permanente de Guatemala ante los organismos de la ONU en Ginebra, donde se incorpora la semana que viene. Carla María Rodríguez resume su etapa en España con talante positivo: “No sé si han sido pocos o muchos años, lo que sé es que han sido muy buenos”.
El servicio diplomático es así, ¿no?
Es normal. Servimos a nuestro país donde y cuando se nos necesita. Ahora será en Ginebra.
¿Cuál será su nuevo cometido?
En marzo tienen lugar en Ginebra distintas reuniones del Consejo de Derechos Humanos y del Consejo de Administración de la Organización Internacional del Trabajo. La persona que estaba allí tuvo que renunciar por razones de salud y no podía quedarse a esas reuniones. A eso se deben estas prisas.
Será un trabajo totalmente diferente al que desempeñaba en España. ¿Cuál prefiere?
Me encuentro muy a gusto en ambos. Hay quienes por mi trayectoria creen que prefiero los organismos internacionales. Pero no es así. Me gustan ambos porque yo trabajo por mi país.
Deja un gran recuerdo en España. ¿Cómo lo ha hecho en tan poco tiempo?
Bueno, yo amo a mi país y creo que la gente lo percibe. La verdad es que aquí he tenido muchísimos aliados que han contribuido a fortalecer las ya excelentes relaciones entre España y Guatemala.
¿Le da pena marcharse?
Sí, un poco. Me hubiera gustado despedirme de todos los que me han ayudado en mi trabajo. El corto tiempo no me lo va a permitir, pero espero que a través de The Diplomat les puedan transmitir mi agradecimiento y mi cariño.
Por cierto, también quiero agradecer a The Diplomat, al que vi nacer y crecer y al que he apoyado en todo lo que he podido, el apoyo que ustedes también me han dado para promocionar Guatemala y Centroamérica.
De estos dos años ¿con que momento se queda?
Tal vez la visita del presidente Rajoy a Guatemala en marzo de 2015. Hacia mucho que la Cumbre del SICA (Sistema de Integración Centroamericana) con España se limitaba a un desayuno al margen de la Cumbre Iberoamericana. Fue muy importante para la relación de España con Guatemala y con Centroamérica.
También viajó con la Reina Sofía a Guatemala.
Fue un verdadero placer acompañar a Doña Sofía en su último viaje de cooperación. Es una mujer muy querida en Guatemala y muy sensible a los temas multiétnicos.
Y en tercer lugar, me alegra mucho que un compatriota, Arkel Benítez, que está haciendo un excelente trabajo, sea el nuevo secretario general de la COMJIB (Conferencia Ministros de Justicia de los Países Iberoamericanos).
¿Se lleva algún mal recuerdo?
No, siempre he tenido buenas experiencias en España. Añadiré mi satisfacción porque las empresas españolas y guatemaltecas han sabido aprovechar muy bien el pilar comercial del Acuerdo de Asociación Centroamérica-Unión Europea, que entro en vigor hace dos años. Espero que podamos seguir ese ritmo.
SUS FAVORITOS
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[box style=»0″]UN LUGAR
«El mar. Donde sea. Me encanta el sonido del mar y caminar descalza por la arena».
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[box style=»0″]UN LIBRO
«“La Bilbia”, como ya dije, por su sabiduría, en particular la del Libro de Proverbios».
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[box style=»0″]UN PLATO
«El jocón, como plato guatemalteco, y los percebes, entre otros productos, de España».
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