<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El embajador de Francia en España, Jean-Michel Casa, aseguró ayer que la Presidencia francesa del Consejo de la UE desea mantener “las vías abiertas para el diálogo con Rusia” y contribuir a que “Europa tenga también su papel” en la crisis de Ucrania.</strong></h4> “No estamos ante una situación en que Estados Unidos o Europea hayan tomado la iniciativa con unas posturas agresivas”, afirmó el embajador durante un desayuno informativo del <strong>Nueva Economía Fórum</strong>. “La realidad es que ha sido Rusia quien ha planteado unas condiciones a la alianza atlántica y a Estados Unidos y ha desplegado millares de soldados en la frontera con Ucrania”, prosiguió. Según el embajador, no es cierto que Europa haya quedado relegada en las negociaciones sobre la seguridad en el continente, sino que todo responde a la política habitual de Rusia “de favorecer el diálogo en primer lugar con Estados Unidos”. Por ello, aseguró, <strong>el objetivo de “toda la política del Alto Representante, Josep Borrell, y de la Presidencia francesa es contribuir a que Europa tenga también su papel” en esta crisis.</strong> “Por supuesto, estamos vinculados a nuestros aliados, pero la idea es hablar entre nosotros en los foros que existen para favorecer el diálogo, como se ha estado haciendo y se hará en los próximos días”, prosiguió el embajador, quien puso como ejemplo la reunión de diez horas que celebraron este pasado miércoles en París los asesores políticos de Rusia y Ucrania, con Francia y Alemania como moderadores, dentro del llamado “<strong>Formato de Normandía</strong>” (surgido a raíz de la anexión rusa de Crimea en 2014), cuyas conclusiones, afirmó, han mandado “una señal positiva de distensión”. Asimismo, informó de que el presidente de Francia, Emmanuel Macron, y el presidente de Rusia, Vladimir Putin, se reunirán hoy para discutir un plan para la desescalada en la crisis de Ucrania y que existe “la probabilidad” de que los ministros de Asuntos Exteriores de Francia y Alemania, Jean-Yves Le Drian y Annalena Baerbock, viajen próximamente a Rusia y Ucrania para “favorecer la distensión, salir de la escalada y entrar en la lógica de la desescalada”. <strong>“Esa es fundamentalmente la política que sigue Europa a través de su Alto Representante y la Presidencia francesa, que no solo es preparar una respuesta a una posible agresión rusa contra Ucrania, preparar sanciones y favorecer una política de disuasión, sino también mantener las vías abiertas para el diálogo con Rusia”,</strong> añadió. <h5><strong>Energía nuclear y ETA</strong></h5> Por otra parte, el embajador negó que Francia defendió la energía nuclear porque genera “independencia energética” y ayuda a la neutralidad en las emisiones de carbono. “Todos los expertos saben y dicen de manera muy clara” que no es posible “lograr la descarbonización de la economía europea con horizonte 2055 sin estas energías”, advirtió. “Es una energía totalmente descarbonizada, que no produce emisiones, barata, y controlada”, que “da a Francia independencia en relación al abastecimiento”, prosiguió. Otros países pueden tener “otra visión sobre el futuro de esta energía”, admitió Casa. Es el caso de España, cuya vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, recordó, “ha expresado sus reticencias en relación con la energía nuclear, que existe en España”. No obstante, advirtió, la “paradoja” es que la energía eléctrica que produce Francia mediante las centrales nucleares se utiliza en otros países a través de la red energética europea se usa en otros países, por lo que “puede ser que en varias ocasiones España tenga que comprarla”. Asimismo, el embajador reconoció que, <strong>“tal vez”, Francia no cooperó suficientemente con España en la lucha contra la banda terrorista ETA “durante los años setenta y ochenta, cuando ETA era especialmente agresiva”, pero recordó que “las cosas cambiaron muy rápidamente al principio de los años ochenta y hubo un compromiso muy claro”.</strong> Por ese motivo, Casa se preguntó cómo es posible que haya españoles que todavía siguen acusando a Francia de haber sido el “santuario” de los etarras, cuando desde entonces “no hubo más refugio en Francia para los etarras”, sino una cooperación judicial y policial excepcional que permitió “no solo combatir la banda terrorista ETA” sino poner fin a su actividad terrorista “para siempre”. “Eso fue el fruto, por supuesto, de la acción determinada de las fuerzas de seguridad españolas y de la justicia española", pero también “una cooperación excepcional entre Francia y España en esta lucha”, añadió durante el acto, al que asistió <strong>el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska</strong>. “Si hay gente que piensa de esta manera, lo piensa con 40 años de retraso”, ya que “la lucha común contra ETA fue decisiva para para el fin del terrorismo”, concluyó. Durante la presentación del acto<strong>, la presidenta del Congreso, Meritxell Batet</strong>, afirmó que Francia es clave ante las grandes amenazas que se ciernen sobre Europa, no solamente por su peso en la construcción de la UE, sino también por su “propia vocación europeísta”. Asimismo, agradeció a Casa por su “rotundo apoyo a España en la crisis diplomática de las fronteras de Ceuta y Melilla”.