<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, fue recibido ayer en Washington por el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, con quien conversó sobre la crisis entre Rusia y Ucrania, la próxima Cumbre de la OTAN en Madrid, la democracia en América Latina y la situación en el Sáhara Occidental.</strong></h4> <strong> </strong> <strong>El encuentro tuvo lugar justo después de una conversación telefónica entre Blinken y el ministro ruso de Exteriores, Serguei Lavrov</strong>, y una horas antes del viaje del secretario de Estado a Ucrania y Alemania en el marco sus esfuerzos diplomáticos para rebajar la tensión. Durante su entrevista con Lavrov, según informó el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, Blinken defendió “la vía diplomática para rebajar las tensiones en torno a la preocupante concentración militar rusa en Ucrania y sus alrededores”, reiteró “el inquebrantable compromiso de Estados Unidos con la soberanía y la integridad territorial de Ucrania” y subrayó que “cualquier debate sobre la seguridad europea debe incluir a los aliados de la OTAN y a los socios europeos, incluida Ucrania”. <strong>“Hemos tratado, por supuesto, la actual situación de crisis entre Rusia y Ucrania, y le he trasladado el compromiso español con nuestros aliados y con Ucrania también, con su integridad territorial y su soberanía, incluida Crimea”</strong>, declaró Albares a la prensa española tras su entrevista con Blinken. “La tensión en Europa y entre los aliados y Rusia es muy grande” y, por ello, “vamos a trabajar juntos por el diálogo, vamos a trabajar juntos por la desescalada y la distensión, pero también vamos a trabajar juntos en la disuasión” en caso de que “el diálogo no diera frutos como nos gustaría”, añadió. “También le he trasladado la unidad de los europeos en este asunto y, más allá, hemos mirado juntos hacia <strong>la Cumbre de la OTAN,</strong> que va a tener lugar el 29 y el 30 de junio en Madrid”, prosiguió Albares. Estos dos temas centraron la mayor parte del encuentro “y el resto del tiempo, el grueso”, estuvo dedicado a América Latina, explicó el ministro. Al respecto, explicó, aunque durante la <strong>reunión “no hablamos sobre Cuba, en concreto”</strong>, sí se abordó “<strong>la triste situación en Nicaragua” </strong>y la “necesaria la liberación de todos los presos políticos”, y <strong>la crisis de Venezuela</strong>, respecto a la cual, aseguró, ambos estuvieron “de acuerdo” en la necesidad de “impulsar el diálogo entre venezolanos” porque “la situación en Venezuela tiene que venir desde los propios venezolanos”. Según informó el portavoz del Departamento de Estado, Antony Blinken y José Manuel Albares conversaron sobre “la importancia de coordinar las acciones en apoyo de la soberanía y la integridad territorial de Ucrania” y reiteraron que “cualquier nueva agresión rusa contra Ucrania tendría como resultado una respuesta severa”. Asimismo, reafirmaron su compromiso de reforzar la cooperación entre Estados Unidos y España “para abordar los retos compartidos, como la promoción de la democracia y los derechos humanos en América Latina, el fortalecimiento de la seguridad transatlántica y otras cuestiones globales”. <h5><strong>Sáhara Occidental</strong></h5> Otro asunto tratado en el encuentro fue la situación en <strong>Sáhara Occidental</strong>, una crisis que se ha agravado especialmente tras <strong>la decisión del anterior presidente norteamericano, Donald Trump, de reconocer la soberanía marroquí sobre el territorio, lo que sirvió de detonante para la grave crisis diplomática que viven Rabat y Madrid desde hace casi un año</strong>. “<strong>Hemos hablado efectivamente de la situación en el Sáhara Occidental y hemos acordado unir fuerzas para resolver un conflicto que ya dura demasiado</strong> <strong>y para el que hay que encontrar una solución”</strong>, declaró Albares. <strong>“También le he informado de que, el viernes en Madrid, me reuniré con el enviado especial del secretario general de la ONU, Stefan de Mistura”</strong>, prosiguió. “Los dos somos miembros del Grupo de Amigos del Sáhara en el seno de Naciones Unidas y hemos estado de acuerdo en unir fuerzas para encontrar por fin una solución a un conflicto que tiene que terminar”, reiteró. El anuncio de Trump se produjo unos meses antes del estallido de la crisis diplomática entre España y Marruecos a causa de la entrada irregular en España del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali. No obstante, el ministro marroquí de Asuntos Exteriores, Nasser Bourita, advirtió a finales de mayo de que el malestar marroquí con España no se había debido al “asunto de un hombre” (en referencia a Ghali), sino al hecho de que España no hubiera adoptado una postura de abierto apoyo a las pretensiones de Rabat en el Sáhara, como sí había hecho Estados Unidos. El pasado mes de julio, el subsecretario de Estado adjunto de Estados Unidos para Oriente Medio, Joey Hood, defendió ante Bourita “un proceso político creíble liderado por la ONU para estabilizar la situación y garantizar el cese de las hostilidades”. Tras su entrevista con Blinken, Albares se reunió con <strong>la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi</strong>; con <strong>el secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro</strong>, en la sede de la organización; y con <strong>el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Mauricio Claver-Carone</strong>, en la sede de la entidad. Asimismo, <strong>Albares y la secretaria de Estado de Asuntos Exteriores y Globales, Ángeles Moreno, mantuvieron una reunión con representantes de empresas españolas en EEUU</strong>, “el primer destino de la inversión española”, según informó el Ministerio a través de Twitter. Durante el encuentro, hablaron sobre la situación económica a raíz de la pandemia del COVID-19 y sobre “las nuevas oportunidades de inversión”.