<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>Dirigentes de Sumar, formación que gobierna en coalición con el PSOE de Pedro Sánchez, asistieron el martes a la toma de posesión de Claudia Sheinbaum, como nueva presidenta de México, pese a que el Ejecutivo español decidió no enviar ninguna representación oficial al acto, tras el veto a Su Majestad el Rey.</strong></h4> Ningún miembro del Gobierno asistió al relevo de Andrés Manuel López Obrador por Claudia Sheinbaum en la Presidencia de México, pero sí lo hizo <strong>Gerardo Pisarello</strong>, secretario primero de la Mesa del Congreso de los Diputados y parlamentario de Sumar por los Comunes, a pesar de que la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, canceló su plan de acudir al acto, tras la decisión del Ejecutivo. Pisarello se desmarcó de la decisión del Gobierno y justificó el veto a Don Felipe, porque, según él, “podría haber pedido disculpas como el Papa Francisco, como muchos monarcas europeos que también pidieron disculpas (...) pero optó por la arrogancia y por el desdén. Y hoy está pagando un precio por esa enorme torpeza diplomática». De la misma formación que Pisarello, estuvo presente en la ceremonia la ex alcaldesa de Barcelona,<strong> Ada Colau</strong>, quien mantiene desde hace tiempo una amistad personal con la nueva presidenta mexicana, a quien llama “mi amiga Shein”. Otra política española que viajaron a México para estar en la toma de posesión fue <strong>Irene Montero, </strong>eurodiputada de Podemos y exministra de Igualdad en el anterior Gobierno de coalición de Sánchez. En su cuenta de la red social X, Montero defendió estrechar lazos con México "a pesar de la monarquía". Estuvo acompañada por <strong>Javier Sánchez Serna</strong>, coportavoz de Podemos y diputado en el Congreso Tampoco se perdieron la ceremonia de asunción de la nueva presidenta:<strong> Jon Iñarritu</strong>, diputado de EH Bildu; y <strong>Ana Pontón</strong>, portavoz en Galicia del BNG. Por el contrario, el portavoz del PSOE en el Congreso,<strong> Patxi López,</strong> reconoció que no le gusta la actitud de Sumar. "Pues la verdad es que personalmente no me gusta –dijo al ser preguntado por la presencia de Pisarello y Colau-. Hay una posición oficial del Gobierno de España que creo que es muy coherente. No se puede rechazar la presencia del jefe del Estado y el Gobierno actúa en consecuencia".