The Diplomat
Al menos 41.632 inmigrantes llegaron de manera irregular a España a lo largo de 2021 por vía marítima y terrestre, lo que representa un aumento de apenas un 0,4% respecto a los 41.468 de 2020, según el balance provisional del Ministerio del Interior correspondiente al periodo entre el 1 de enero y el 28 de diciembre. Este incremento contrasta claramente con el del año anterior, que fue de alrededor de un 30% respecto a 2019.
Por vía marítima, en 2021 llegaron a España un total de 39.835 personas en 2.146 embarcaciones, con un incremento de solo un 0,1% en lo que corresponde al número de personas y un descenso del 1,4% en lo que corresponde a las embarcaciones.
No obstante, los datos muestras algunas diferencias entre Canarias y el resto del país. El archipiélago recibió en 2021 un total de 22.200 personas (apenas un 2,1% más respecto a 2020) y 540 embarcaciones (con un descenso de nada menos que un 27,2% respecto a las 742 del año anterior). En cambio, para la península y Baleares, las cifras son de 16.991 personas, un 2,6% más respecto a las 16.560 del año anterior, y 1.476 embarcaciones, con un incremento del 13,4% respecto a las 1.302 de 2020. También por vía marítima, Ceuta recibió 605 personas en 2021 (un aumento del 20,3%) y Melilla sólo 39 personas (un descenso del 12%).
En las ciudades autónomas, el mayor incremento se produjo en las entradas por vías terrestres, con 1.797 personas, un 7,3% más que las 1.674 del año anterior. No obstante, las diferencias entre las dos ciudades son evidentes, ya que Ceuta recibió en 2021 un total de 705 personas, con un incremento de nada menos que un 164% respecto a las 267 de 2020. En cambio, Melilla recibió más personas (1.092), pero la cifra muestra un claro descenso del 22,4% en comparación con las 1.407 del año anterior.
Ceuta fue el principal escenario de la grave crisis diplomática que estalló el pasado mes de abril entre España y Marruecos a causa de la supuesta entrada irregular en Zaragoza del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali. El pasado 17 de mayo, cerca de 9.000 personas entraron en Ceuta, a nado o a pie, después de que la Policía marroquí suavizara temporalmente los controles fronterizos. Al menos 1.200 de esas personas eran menores no acompañados, de los cuales alrededor de 700 continúan en España a la espera de su retorno a Marruecos.