Óscar Ruiz
Experto en migraciones y analista internacional
Cada dos años, el Centro del Comando Indo-Pacífico de los Estados Unidos convoca los ejercicios militares marítimos más grandes del planeta. Con más de 35.000 tropas participantes, 29 naciones, 46 buques de superficie, 4 submarinos nucleares y una multitud de fuerzas aéreas y terrestres, los ejercicios militares del Rim del Pacífico, o RIMPAC, son uno de los eventos de entrenamiento más destructivos a nivel mundial.
Ejercicios y actividades
– Humanitarian Aid and Disaster Relief (HADR). Se ha organizado el mayor ejercicio de ayuda humanitaria y respuesta a desastres hasta la fecha, con la participación de ocho países, cinco barcos, cinco lanchas de desembarco, cinco aeronaves, múltiples fuerzas terrestres y más de 2,500 participantes.
– SINKEX. Ejercicio de hundimiento en vivo del viejo USS Tarawa (LHA-1), un buque de asalto anfibio de 40,000 toneladas, para demostrar la capacidad de neutralizar grandes buques anfibios similares a los operados por China.
– Otras maniobras. Guerra antisubmarina, guerra de superficie con múltiples buques, desembarcos anfibios multinacionales y defensa de un grupo de ataque de portaaviones contra fuerzas simuladas.
Comando y Liderazgo
El Vicealmirante John Wade, Comandante de la 3ª Flota de EE.UU., dirige la Fuerza de Tarea Combinada de RIMPAC 2024. Y, por primera vez, un miembro de la Armada de Chile, el Comodoro Alberto Guerrero, sirve como subcomandante de la Fuerza de Tarea Combinada. Otros líderes clave incluyen al Contralmirante Kazushi Yokota de la Fuerza de Autodefensa Marítima de Japón y al Comodoro Kristjan Monaghan de la Armada Real Canadiense.
RIMPAC 2024, que comenzaron el pasado 26 de junio y acabaran el próximo 2 de agosto, sirven para fomentar y mantener relaciones cooperativas, esenciales para garantizar la seguridad de las rutas marítimas y apoyar una región Indo-Pacífico libre y abierta, y por qué no, para dejar claro quién manda en el Indo-Pacífico.
El ejercicio enfatiza la interoperabilidad y la cooperación estratégica entre las naciones participantes, contribuyendo a la paz y la estabilidad en la región.
RIMPAC comenzó como un ejercicio de entrenamiento anual en 1971 y se convirtió en bienal en 1974. En sus primeras ediciones, participaron solo algunas naciones, principalmente Australia, Canadá y Nueva Zelanda, junto con los Estados Unidos. Fue durante los años 80 cuando la participación en RIMPAC comenzó a expandirse significativamente, incluyendo más países de la región del Pacífico y aliados clave de fuera de la región. En la década de 2000, el ejercicio continuó creciendo, con la inclusión de naciones europeas y asiáticas, reflejando el aumento de la cooperación internacional en materia de seguridad.
- Países fundadores: Estados Unidos, Australia, Canadá, y Nueva Zelanda fueron los primeros países en participar.
- Naciones participantes: En las ediciones recientes, el número de países participantes ha aumentado a casi 30, incluyendo Japón, Corea del Sur, India, Francia, Reino Unido y muchos otros.
- Incorporación de nuevos participantes: Con el tiempo, se han incorporado naciones de América Latina, Europa y Asia, reflejando la importancia global de la seguridad marítima.
¿Para qué se hace RIMPAC?
La Interoperabilidad es uno de los principales objetivos de RIMPAC, entre las fuerzas navales de los países participantes, lo que incluye la comunicación, coordinación y ejecución de operaciones conjuntas. Además de esto, el adiestramiento y capacitación, para lo que RIMPAC ofrece una plataforma para el entrenamiento en una amplia gama de operaciones militares, incluyendo guerra antisubmarina, guerra de superficie, operaciones anfibias, defensa aérea y asistencia humanitaria.
Estos ejercicios son también un referente en cuanto a innovación y tecnología ya que el ejercicio sirve como campo de pruebas para nuevas tecnologías y tácticas militares, permitiendo a las naciones participantes probar y evaluar sus equipos en un entorno multinacional. En años recientes, RIMPAC ha incluido componentes significativos de ayuda humanitaria y respuesta a desastres, subrayando el papel de las fuerzas armadas en la asistencia y socorro en situaciones de emergencia.
Pero unas maniobras militares de tal magnitud conllevan también controversia y polémica, especialmente por su impacto ambiental. RIMPAC ha enfrentado muchas críticas por su impacto en el medio ambiente, especialmente en las áreas de conservación marina y terrestre en Hawái, donde ha sido y es muy criticado. También este adiestramiento marítimo tiene sus implicaciones políticas, debido a la participación de ciertos países y la naturaleza de algunos ejercicios pueden generar debates sobre las implicaciones geopolíticas de RIMPAC.