The Diplomat
El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, habló ayer con los responsables de la Misión de Naciones Unidas en el Líbano (FINUL), en la que hay un contingente español desplegado, para trasladarles el «apoyo» del Ejecutivo a su labor ante la gravedad de la escalada bélica entre Israel y Gaza.
El propio Sánchez dio cuenta, en la red social X, de que había mantenido una conversación con el general Aroldo Lázaro, jefe de la Misión de Naciones Unidas en Líbano, y con el general Luis Jesús Fernández Herrero, al mando del Sector Este, donde está desplegado el contingente español.
El jefe del Ejecutivo aseguró que «los soldados españoles desplegados en Líbano siguen trabajando por la estabilidad regional».
La artillería de las Fuerzas de Defensa de Israel atacó el sábado la zona de Líbano desde donde aseguran que se ha disparado contra su territorio, y que está controlada por la milicias de Hizbolá.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores en funciones, José Manuel Albares, conversó ayer telefónicamente con sus homólogos de Israel, Catar, Turquía y Arabia Saudí para seguir la evolución de la situación de estado de guerra declarado tras los ataques del movimiento islamista Hamás desde la Franja de Gaza contra territorio de Israel, cuyo Ejército ha contraatacado.
A través de mensajes en la red social X, Albares señaló que también contactó en la noche del sábado con el Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, para «coordinar la acción europea».
El ministro dijo que en las conversaciones hablaron sobre cómo abordar los ataques a Israel y sus consecuencias, y añadió: “Debemos evitar escalada regional del conflicto y pérdida de más vidas inocentes”.
El día anterior, además de con su colega de Israel, Albares habló también con los de Jordania, Egipto y Palestina.
El ministro indicó, asimismo, que los equipos de la Embajada de España en Tel Aviv y del Consulado en Jerusalén están plenamente movilizados para atender a los ciudadanos españoles en Israel.
Según las respectivas autoridades, más de 700 personas han muerto en Israel y cerca de 400 en la Franja de Gaza a causa de las acciones entre las partes desde el inicio de la ofensiva el pasado sábado. Hay además más de 4.000 heridos en total y un centenar de israelíes han sido tomados como rehenes por Hamas.