Arnoldo André Tinoco
Ministro de Relaciones Exteriores y Culto de Costa Rica
Alberto Rubio
“Promover la Conferencia de Alto Nivel sobre Acción Oceánica, que Costa Rica va a organizar los próximos 7 y 8 de junio,” es el objeto de la gira que ha traído a Europa al ministro costarricense de Relaciones Exteriores, Arnoldo André Tinoco, como explica a The Diplomat durante la entrevista que mantenemos en la biblioteca de Casa América.
¿Esta reunión de San José es previa a la Conferencia de la ONU sobre los océanos que se celebrará en 2025?
Así es. Queremos llevar los resultados que salgan de ella a Niza, donde Costa Rica y Francia seremos los coanfitriones de la tercera conferencia de Naciones Unidas sobre los Océanos, después de la celebrada en Lisboa hace dos años.
Aprovechando eso, Costa Rica ha invitado a esta reunión, llamada ‘Inmersos en el Cambio’, a representantes de alto nivel de los estados, la comunidad científica, académica, la sociedad civil y la juventud para intercambiar buenas prácticas de sostenibilidad en los océanos, incluso con lo que llaman los anglófonos un matchmaking, una mesa de intercambio con la presencia de la comunidad financiera internacional que quiera apoyar a países para adoptar esas buenas prácticas.
Ustedes ya tienen experiencia en protección del medio ambiente. ¿Qué propuestas van a plantear?
Costa Rica tiene un amplio liderazgo de sostenibilidad. Logró revertir la tasa de deforestación y convertirla en reforestación, y pasar de un 30% de cobertura boscosa en los años setenta a un 60% actualmente. Y logró ya las metas de la Coalición de Alta Ambición de Naciones Unidas (HAC) para la protección del 30% de las tierras y los océanos para el año 2030.
Con Panamá, Colombia y Ecuador, por ejemplo, tenemos el Área de Protección del Pacífico (Semar), que une a cada país con sus islas: Ecuador con los Galápagos; Colombia con su isla Malpelo; Panamá con Cohiba; y Costa Rica con Isla del Coco. En total, formamos una zona de 500.000 km² de protección en el Pacífico. Es un acuerdo regional internacional que supone un buen ejemplo de cooperación. También fuimos líderes en la negociación y conclusión del Tratado de Protección de la Biodiversidad en Alta Mar (BBJ). Y ahora estamos activamente negociando los convenios para luchar contra la contaminación del plástico en los mares.
¿Cuál sería un resultado satisfactorio en la Conferencia de Niza?
Uno de los grandes temas que tenemos, donde también estamos liderando, es la moratoria o prórroga precautoria a la minería del subsuelo marino. Costa Rica y otros 25 países que ya se han sumado a la coalición nos oponemos a esa minería sin que la ciencia haya demostrado que es factible sin causar mayor daño o que es sostenible. Hay grandes compañías que han logrado el apoyo, sobre todo de algunas islas del Pacífico Sur, para comenzar con la minería del subsuelo marino, que tememos que podría ser muy destructiva.
¿Esa minería incluye la extracción de petróleo, por ejemplo?
Exactamente, petróleo y otros minerales. Eso lo vamos a llevar decididamente a Niza. Y además queremos también negociar y acordar las convenciones contra la contaminación del plástico, e iniciar sus procesos de ratificación.
Supongo que algunos países pondrán su desarrollo por delante del respeto a la ecología. ¿Cómo se les puede convencer?
Bueno, es que hay que cambiar de paradigma. Los océanos ya no pueden ser considerados como un ‘mar de nadie’, sino un ‘mar de todos’. Y corresponde a la comunidad internacional desarrollar también los fondos necesarios para el correcto uso de ese recurso común. Por ejemplo, el océano contribuye un 20% al cambio climático. Unos océanos sanos nos darán un clima sano. Unos océanos enfermos agravarán el cambio climático.
¿Cuentan ustedes con España para avanzar en estos objetivos?
Por supuesto. España comparte la mayoría de estos valores. Y hay una gran cooperación entre Costa Rica y España en esta lucha.
Me han comentado que tiene la intención de invitar a la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, al evento de San José.
Sería una maravilla si podemos contar con su presencia y de otras altas autoridades, aunque comprendemos que en esas fechas se celebran las elecciones al Parlamento Europeo. Pero, bueno, a lo mejor es posible su asistencia.
Hablando de temas europeos, Costa Rica es parte desde 2013 del Acuerdo de Asociación entre la UE y Centroamérica, aunque no ha entrado en vigor hasta hace poco. ¿Por qué?
Así es. Hace dos semanas que entró en vigor tras la ratificación del Parlamento de Valonia, en Bélgica, que lo tenía de rehén. Ese acuerdo prevé el diálogo político, los sistemas de cooperación intrarregionales y la parte comercial y de inversiones que hasta ahora tenía una aplicación provisional. La entrada en vigor nos da un marco ya formalizado, institucionalizado, de las relaciones entre Europa y Centroamérica.
¿Ese acuerdo recoge las expectativas de Centroamérica?
Sí. Con España ya tenemos también el tratado de protección de inversiones, el tratado para evitar la doble imposición fiscal y ahora, con el Acuerdo de Asociación, ya tenemos el marco institucional completo. De hecho, España es el segundo inversor extranjero en Costa Rica y contribuye decididamente a los grandes proyectos de desarrollo nacionales.
¿Costa Rica echa en falta avanzar ahora, quizá, hacia un Tratado de Libre Comercio?
Siempre la ambición es incrementar la intensidad de las relaciones, explorar áreas de cooperación más fuerte e intensa. Ahora, en los procesos de digitalización, de modernización y eficiencia del país creemos que España puede aportar. Lo ha hecho, y estamos muy agradecidos por su ayuda, en materia cibernética, en el combate a los ataques que sufrimos en abril de 2022. Fue un decidido socio para recuperar la información que habían perdido el sistema de Seguridad Social y el Ministerio de Hacienda. Ahora nuestro sistema de Seguridad Social busca apoyo en España para tratar de solucionar las largas listas de espera que hay para intervenciones quirúrgicas. Y siempre hemos tenido oídos abiertos por parte de España.
¿Entran esos asuntos dentro del Acuerdo de Cooperación Avanzada que firmaron España y Costa Rica?
Correcto. Y no sólo tenemos ese instrumento. Ahora tenemos también el ‘Global Gateway’ europeo, que tiene fondos disponibles para financiar cualquier proyecto de cooperación entre España y Costa Rica.
¿Cómo se ve desde Costa Rica la situación europea actual, en la que tenemos un serio problema con la guerra contra Ucrania?
Con altísima preocupación. Costa Rica fue uno de los primeros países en condenar decididamente la agresión rusa sobre el territorio de Ucrania y en expresar nuestra absoluta solidaridad a Ucrania. Por supuesto que los efectos económicos los sentimos en todo el mundo porque el aumento de precios es evidente. Cualquier cosa de esa magnitud que suceda aquí tiene un efecto, directo o indirecto, en nuestras economías. En ese sentido, todo nuestro apoyo a las políticas europeas.
Hace dos años el presidente Alvarado visitó España. ¿Debemos esperar una nueva visita pronto?
La agenda del presidente es siempre muy apretada. Pero no excluimos una segunda gira. Ya estuvo acá con ocasión de una invitación del presidente Macron para preparar la conferencia de Niza y aprovechó para visitar Holanda y Bélgica. Pero tiene pendiente la visita a lo que antes se llamaba las grandes potencias, donde incluso está España.