The Diplomat
La Residencia Militar Alcázar, en Madrid, acogerá entre los días 6 y 7 de marzo la trigésimo octava reunión del Comité Director de la Iniciativa 5+5 Defensa, que supondrá el primer encuentro de alto nivel de la actual Presidencia española de este foro de encuentro informal entre países del Mediterráneo Occidental.
La cita contará con la asistencia de delegaciones de los Ministerios de Defensa de los diez países integrantes de la Iniciativa 5+5 Defensa (Argelia, Francia, Italia, Libia, Malta, Marruecos, Mauritania, Portugal, España y Túnez) y estará presidida por el general de división Ramón Armada Vázquez, general asesor del secretario general de Política de Defensa para retos transversales de seguridad y defensa.
Durante estos dos días, según informó el Ministerio de Defensa en una nota de prensa, está previsto que los participantes realicen un seguimiento de las actividades de cooperación militar previstas en el Plan de Acción para este año, inicien la programación del Plan de Acción para el año 2025 y supervisen las actuaciones de los órganos académicos que integran la Iniciativa, como el Colegio de Defensa 5+5 y el Centro Euro-Magrebí de Investigación y Estudios Estratégicos (CEMRES por sus siglas en francés).
“Esta reunión de alto nivel supone el primer hito relevante de la Presidencia española de la Iniciativa 5+5 de Defensa, durante la que se ejecutará un ambicioso plan de hasta 74 actividades de carácter multilateral (doce de ellas organizadas por España) en diversos ámbitos, como seguridad marítima y aérea, ciberdefensa, sanidad en operaciones o perspectiva de género en operaciones en el exterior”, destacó el Ministerio.
España actualmente la Presidencia anual de turno de la Iniciativa 5+5 Defensa, constituida en el año 2004 a propuesta de Francia y en el ámbito del Diálogo 5+5 -un foro informal de los países de la región, activo desde 1990-, con el objetivo de desarrollar la cooperación multilateral en el Mediterráneo Occidental en ámbitos como seguridad marítima, seguridad aérea, búsqueda y rescate en el mar, apoyo a las autoridades civiles en situaciones de catástrofes, formación, investigación, operaciones especiales, ciberdefensa y desminado humanitario. España ha tomado el testigo de Portugal.