<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>Más de 12.000 militares y guardias civiles españoles participaron en 2023 en alguno de los contingentes desplegados por España en el exterior, lo que convierte a nuestro país en el mayor contribuyente a las misiones de la UE y el cuarto en el ámbito de la OTAN.</strong></h4> Así lo comunicó ayer <strong>la ministra de Defensa, Margarita Robles</strong>, durante su comparecencia ante la Comisión de Defensa del Congreso de los Diputados, en la que informó sobre las misiones en el exterior de las Fuerzas Armadas durante 2023. <strong>“Tengo que decir, con satisfacción, que en este momento España es el país que realiza mayores contribuciones de misiones en el ámbito de la UE y el cuarto en el ámbito de la OTAN”</strong>, lo que refleja “el compromiso de España con la paz”, aseguró la ministra. En “un complejo e inestable escenario geoestratégico” como el actual, como consecuencia de la guerra en Ucrania y en Gaza y de un aumento de las amenazas a la seguridad en el Sahel, <strong>un total de 12.075 militares y guardias civiles participaron a lo largo de 2023 en alguno de los contingentes que España ha desplegado en las 17 misiones en el exterior, “de los cuales el 9,9% fueron mujeres”,</strong> prosiguió. Según Robles, las misiones en las que participan las Fuerzas Armadas españolas se agrupan en dos bloques: “aquellas que tiene por objetivo principal garantizar la disuasión y defensa y aquellas en las que la finalidad es la proyección de la estabilidad”. “La guerra de <strong>Ucrania</strong> y la amenaza que para la seguridad de los Estados de Europa, especialmente para nuestros socios y aliados del flanco Este, supone la actitud de Rusia, ha llevado a un importante refuerzo de la política de disuasión y defensa colectivas” por parte de la OTAN, lo que “ha supuesto un incremento de los efectivos desplegados por todos los aliados y, por tanto, obviamente por España”, explicó. En este marco se desarrolla <strong>la operación Presencia Avanzada Reforzada (eFP) de la OTAN en Letonia</strong>, liderada por Canadá y cuyo objetivo es “contribuir a la disuasión por parte de la Alianza y, en su caso, a la defensa y protección de Letonia o de cualquier otro país báltico o Polonia”. <strong>España cuenta con un contingente de 700 efectivos en esta misión, </strong>“fundamentalmente personal de la Brigada Aragón I y el Mando de Artillería Antiaérea”. “Tuve ocasión de estar en los primeros días de diciembre en Letonia y con nuestro contingente, y les puedo asegurar que es un orgullo ver a nuestros hombres y a nuestras mujeres”, manifestó. Aparte, las Fuerzas Armadas españolas también han asistido a la OTAN en <strong>operaciones de policía aérea en Rumanía o en Estonia o de refuerzo de las defensas antiaéreas en Lituania o Rumanía</strong>, “que los propios países de la Alianza le han pedido a España”, prosiguió. Asimismo, continuó, “<strong>unos 2.500 militares de los ejércitos y la Armada” han participado “hasta la fecha” en la Misión de la Unión Europea de Asistencia Militar a Ucrania (EUMAN UA</strong>), que proporciona adiestramiento general y especializado a los soldados de ese país y de la que se han beneficiado “más de 3.300 militares ucranianos”. Dentro del concepto de disuasión se encuentra también la misión de apoyo a <strong>Turquía</strong>, con el despliegue de una unidad Patriot, integrada por 138 efectivos. El personal de esta misión, según Robles, “tuvo un papel muy destacado junto a la UME en la ayuda humanitaria en el terrible terremoto” que asoló el país. Asimismo, España participa en las <strong>Agrupaciones Navales Permanentes de la OTAN</strong>, en el marco de las Fuerzas de Respuesta Muy Rápida de la Alianza. <h5><strong>Líbano e Irak</strong></h5> En cuanto a las misiones de estabilidad, destaca, en primer lugar, <strong>la misión de Naciones Unidas en Líbano (UNIFIL), que lidera España bajo el mando del teniente general Aroldo Lázaro</strong> (con quien se reunió esta semana el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, durante su gira por Oriente Próximo), “cuyo mandato ha sido, precisamente por su eficacia, recientemente renovado hasta febrero de 2025”. Según Robles, 656 militares y siete civiles (intérpretes) están desplegados en la ‘Operación Libre Hidalgo’ que vigila la línea fronteriza (Blue Line) entre Líbano e Israel. “Además, bajo mando español, están militares serbios, salvadoreños, brasileños, argentinos, indonesios, indios, nepalíes y kazajos”, agregó. En esta zona, recordó la ministra, se ha producido un incremento de la tensión a raíz de la crisis generada por los ataques de Hamás contra los israelíes el 7 de octubre y la respuesta bélica del Gobierno de Benjamin Netanyahu. “Pese al hostigamiento entre las partes, a través de la Blue Line, las fuerzas españolas continúan operando sobre el terreno cumpliendo su misión, en una situación de enorme riesgo”, aseguró. En <strong>Irak,</strong> recordó Margarita Robles, <strong>el jefe de la misión de la OTAN es (desde mayo de 2023) otro español, el teniente general José Antonio Agüero</strong> (a quien también visitó ayer Albares). “Frente a aquellos que dicen que España no se implica y no participa, creo que estos liderazgos ponen de relieve ese compromiso de España”, manifestó. En este país, recordó, el contingente español tiene dos pilares: por un lado, la Coalición internacional para derrotar al Daesh mediante la Operación Inheret Resolve y, por otro, la Misión de la OTAN en Irak (NMI), que tiene por finalidad complementar a la anterior, centrándose en el asesoramiento a las autoridades iraquíes para el desarrollo y afianzamiento de sus instituciones de seguridad y defensa, así como la consecución de unas condiciones y capacidades que imposibiliten la vuelta del Daesh. El futuro de Inherent Resolve “está en cuestión porque el Gobierno iraquí tiene serias dudas y nos lo ha trasladado, que probablemente esa misión no continúe”, precisó. <h5><strong>Atalanta y el Mar Rojo</strong></h5> Margarita Robles dedicó también unas palabras a la <strong>Operación Atalanta</strong> de lucha contra la piratería en aguas del golfo de Adén y Somalia, “que estos días ha estado de moda”, cuyo Cuartel General se encuentra en la Base Naval de Rota y cuyo comandante es otro español: el vicealmirante Ignacio Villanueva Serrano. Según la ministra, “a pesar de que el fenómeno de la piratería se encontraba contenido desde 2019, la situación en la zona de operaciones se ha deteriorado considerablemente en los últimos meses, produciéndose diversos incidentes de asalto a buques en alta mar”. En cuanto a la “gran labor que está realizando la fragata <em>Victoria</em> en el océano Índico”, advirtió, <strong>“pretender que, de esta misión, con una única fragata, se pudieran realizar misiones en el Mar Rojo, es desconocer por completo la realidad de lo que ocurre en el Índico y el gran trabajo que realiza la Armada española en ese seguimiento y monitorización de la piratería”.</strong> El futuro inmediato de la Operación prevé el relevo de la fragata <em>Victoria</em> por la fragata <em>Canarias</em>, que se mantendrá en la zona desde el próximo mes de febrero hasta junio. Con respecto a la zona del <strong>Sahel,</strong> donde hay tropas españolas en Mali bajo el paraguas de la UE, la ministra Robles reconoció que “el pasado año se ha producido una pérdida de influencia europea” en el conjunto de la región y que la continuidad de la EUTM Mali está pendiente de revisión estratégica, prevista para este 2024.