<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>El número de migrantes que llegaron de forma irregular a España en 2023 aumentó un 82,1 por ciento respecto al año anterior, un incremento que alcanza un porcentaje del 116,8% en el caso de los menores de edad, según informó la ONG Save the Children.</strong></h4> Concretamente, según indicó la organización este pasado jueves, <strong>la cifra total de migrantes pasó de 31.219 en 2022 a 56.852 en 2023,</strong> según datos del Ministerio de Interior. De este total, <strong>5.151 corresponden a niños y niñas menores de 18 años, lo que se traduce en un 116,8% más que en el año anterior. </strong>En el 2022, el número fue de 2.375, y tanto en ese año como en 2023, la inmensa mayoría se trataba de niños, aunque en los últimos meses se ha visto un incremento de la llegada de niñas. <strong>La comunidad autónoma de Canarias fue la que más migrantes recibió y también la que registró un mayor flujo de niños, niñas y adolescentes respecto a años anteriores</strong> (2.274 a fecha de 6 de octubre de 2023 frente a los 1.713 de 2022, según datos del Gobierno canario). Las llegadas marítimas a Baleares, Península y Melilla aumentaron y bajaron en Ceuta, mientras que también se redujo el número de llegadas terrestres a Melilla y Ceuta. <strong>“Una de las razones por las que se ha visto este crecimiento de las llegadas a Canarias es por la situación crítica que se vive en el Magreb y en otros países cercanos como Senegal”,</strong> explicó Catalina Perazzo, directora de políticas de infancia en Save the Children. Senegal vive una crisis social y política que ha desembocado en disturbios y enfrentamientos y que puede ser una de las razones por las que miles de personas migraron en octubre. El archipiélago recibió casi 15.000 migrantes en ese mes. A las causas políticas, se añade la inestabilidad alimentaria y la crisis climática, que genera cada vez más migraciones. A nivel global, Naciones Unidas calcula que cada año 20 millones de personas abandonan su hogar por fenómenos meteorológicos extremos, como la sequía prolongada, las lluvias torrenciales y la desertificación, entre otras. Aparte, <strong>el número de muertes de adultos y niños en 2023 en el momento en que se dirigían a España -tanto en la ruta canaria como en el Mediterráneo – asciende a 1.411,</strong> según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), que reconoce que podrían ser muchos más los fallecidos. Al menos <strong>51 niños, niñas y adolescentes murieron durante su ruta migratoria</strong>. Según Save the Children, se trata de menores que huyen de países en guerra, de entornos hostiles o de la falta de oportunidades en sus países de origen.