The Diplomat
La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha solicitado el archivo provisional de la investigación abierta por la muerte de los españoles Iván Illarramendi y Maya Villalobo durante el ataque terrorista perpetrado por Hamás el pasado 7 de octubre en Israel, ante la imposibilidad de determinar qué personas concretas fueron responsables.
Según informó el diario El Confidencial y confirmó ayer la agencia Europa Press, la Fiscalía solicitó ese sobreseimiento el pasado 1 de diciembre después de recibir un informe policial en el que se afirmaba que todo apuntaba a que las dos muertes se produjeron por la acción terrorista de Hamás.
El Juzgado Central de Instrucción número 3 deberá determinar si sigue el criterio del Ministerio Público o si decide continuar con la investigación de las dos muertes. Fuentes jurídicas precisaron a Europa Press que, al tratarse de una petición de sobreseimiento provisional, la causa podría reabrirse si se aportaran nuevos indicios.
La Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), personada en la causa como acusación popular, ha rechazado este sobreseimiento por entender que se debe pedir antes a las autoridades judiciales de Israel toda la información relativa a estos hechos.
A su juicio, es “necesario incorporar información relevante por parte de las autoridades judiciales de Israel sobre cómo se desarrollaron los hechos y su autoría a los efectos de poder ofrecer información oficial a los familiares de las víctimas”. Asimismo, advierte de que el origen de la mayoría de los datos de los que se dispone procede de “fuentes abiertas”, principalmente medios de comunicación y comunicaciones públicas del Ministerio de Asuntos Exteriores.
Durante los atentados de Hamás murieron dos españoles. Una de las víctimas fue Maya Villalobo Sinvany, de 19 años y cuyo padre reside en Sevilla, que disponía de la doble nacionalidad y que se encontraba en Israel para realizar el servicio militar, concretamente en un puesto del Ejército en Nahal Oz, próximo a Gaza. El otro fallecido fue Iván Illarramendi, nacido hace 46 años en Zarautz (Gipuzkoa) y que residía en el kibutz Kissufim, próximo a la Franja de Gaza, junto a su mujer, la chilena Dafna Garcovich. Durante un tiempo se dio por secuestrados a Illarramendi y Garcovich, pero finalmente se confirmó que habían sido asesinados durante los atentados.