Eduardo González
El secretario de Estado para la Unión Europea, Juan González-Barba, aseguró ayer que el Fondo Europeo de Recuperación podría marcar “un antes y un después” en la senda de la integración política de Europa.
“El Fondo de Recuperación representa un antes y un después” porque facilitará “la senda federalizante” hacia la unión financiera, fiscal y política de la UE, declaró el secretario de Estado durante la presentación, por videoconferencia, del informe La Unión frente a la tormenta perfecta, elaborado por la Fundación Alternativas y la Friedrich Ebert Stiftung. En todo caso, admitió, “la federación es un concepto divisivo, y por eso prefiero hablar de una mayor integración, sin adjetivos”.
A juicio de González-Barba, aunque la creación del Fondo de Recuperación ha sido posible gracias a la existencia del llamado eje franco-alemán, ello no implica que España se vaya a convertir en un mero satélite de las dos grandes potencias europeas tras la salida del Reino Unido.
“Hay un debate sobre si España es una tercera pata, pero no refleja la realidad”, advirtió. “España quiere tener la mejor relación posible con estos dos países tractores de la UE, y donde estemos de acuerdo, nos sumaremos, pero a veces el acuerdo franco-alemán no refleja al cien por ciento las prioridades españolas y es importante buscar otras alianzas que permitan impulsar los dosieres españoles en interés de España y la UE”, explicó. Un ejemplo de ello, precisó, es el pacto migratorio, en el que la propuesta española está más próxima a la de “otros países de entrada en el Mediterráneo, como Italia”.
Por otra parte, González-Barba destacó entre los principales retos actuales de la UE la defensa del “pilar social europeo”, la “autonomía estratégica” en materia de sanidad y medicamentos, política industrial y digitalización, que “no debe ser un eufemismo para un nuevo proteccionismo”, y la superación del principio de unanimidad en las tomas de algunas decisiones, un objetivo que, “no nos engañemos, está muy lejos todavía”.
Iratxe García y Esteban González Pons
Durante el mismo acto -moderado por Diego López Garrido, vicepresidente ejecutivo de la Fundación Alternativas, y María Pallares, coordinadora de programas de la oficina de Madrid de la Friedrich Ebert Stiftung-, la presidenta del Grupo Socialistas y Demócratas (S&D) en el Parlamento Europeo, Iratxe García, advirtió de que Europa debe ser capaz de encontrar una “respuesta global” a la crisis del COVID-19 porque “si la ciudadanía siente que no somos útiles, va a dejar de confiar en el proyecto europeo, y ese es el momento en el que crecen los populismos y los movimientos antieuropeos”.
Por su parte, el vicepresidente del Grupo Popular en el Parlamento Europeo, Esteban González Pons, afirmó que, de la misma forma que el COVID-19 “nos ha obligado a ser realistas y a adoptar decisiones importantes que de otra manera se habrían retrasado”, también “está tapando los verdaderos problemas que están detrás del coronavirus y que ahora no vemos”.
“Hemos sido capaces de cerrar el presupuesto de la UE, un pacto de recursos propios y el plan de recuperación New Generation, y de acordar un mecanismo sobre el Estado de derecho que impedirá recibir fondos europeos a los países que lo contravienen, y sin la presión de la crisis provocada por el COVID-19 jamás lo habríamos conseguido”, declaró.
“La pandemia ha sido un impulso, pero, a la vez, las prisas por el virus están tapando muchas deficiencias en el programa de la UE”, como el “nacionalismo y populismo, que son el verdadero cáncer que nos devora por dentro”; el “terrorismo”, que puede hacer que “el europeísmo retroceda en muchos países”; o el problema migratorio, que se va a ver especialmente afectado por la crisis porque “también ha afectado mucho al norte de África, que vive del turismo”.