<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, elogia en una entrevista publicada el domingo por el diario argentino “Pagina 12”, que Pedro Sánchez recibiera al líder opositor venezolano Leopoldo López como secretario general del PSOE, en la sede de ese partido, y no en la Presidencia del Gobierno.</strong></h4> Con motivo de su estancia en La Paz acompañando al Rey en la toma de posesión del nuevo presidente boliviano, <strong>Luis Arce,</strong> el líder de Unidas Podemos concedió unas declaraciones en las que, entre otras cosas responde a una pregunta sobre la decisión del Gobierno español de “colaborar” en la huida de Leopoldo López, que se encontraba refugiado en la Embajada de España. Iglesias subraya que “Venezuela se ha convertido en un artefacto de la derecha mundial para atacar a la izquierda en cualquier país”. Y añade: “Se ha vuelto un significante con el que la derecha y ultraderecha tratan de desacreditar a sus adversarios políticos a costa de la estabilidad en Venezuela”. En línea con las acusaciones vertidas contra Leopoldo López desde el régimen de <strong>Nicolás Maduro</strong>, Pablo Iglesias, dice que “como máximo responsable político de Unidas Podemos”, opina que el opositor venezolano “no ha apostado por las vías democráticas y pacíficas en su país”. Por ello, agradece a <strong>Pedro Sánchez</strong> “que recibiera a López como secretario general del PSOE y en la sede de su partido”. “Es un gesto -dice- gesto que circunscribe esa relación entre formaciones políticas”. “España tiene que contribuir a que la solución se produzca por vías democráticas y pacíficas, desde el diálogo y el respeto”, añade, antes de asegurar que el expresidente del Gobierno español <strong>José Luis Rodríguez Zapatero</strong> “está mostrando gran capacidad a la hora de señalar el camino por el que tenemos que apostar los demócratas”. En la misma entrevista, el vicepresidente segundo vuelve a expresar su apuesta en favor de la República frente a la Monarquía en España. “La República -afirma- es un horizonte, un proyecto de futuro, que además la pandemia ha reactualizado al poner en primer plano lo público, la dignidad del Estado que contrasta con la terrible imagen que da el exjefe del Estado con las enormes sospechas de corrupción y los procesos en su contra, que huye del país y se va a los Emiratos Árabes Unidos. Algo que afecta a la institución monárquica porque es hereditaria, mediante la filiación. Nosotros somos republicanos, vamos a trabajar por ello. Cada vez más ciudadanos en España quieren que el país sea una república. Tomando pie de la “Declaración de la Paz”, que firmó junto a otros mandatarios, ex mandatarios y dirigentes iberoamericanos de izquierda, asegura que “la mayor amenaza para nuestros sistemas democráticos es la ultraderecha y el comportamiento de determinados poderes mediáticos que desprecian la verdad”.