<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>La ministra de Asuntos Exteriores efectuará entre hoy y mañana sendas visitas oficiales a Turquía y Grecia, en un momento de fuerte tensión en las relaciones entre Ankara y la UE a causa, entre otros motivos, de las acciones turcas en el Mediterráneo Oriental y en Libia y de la reciente conversión de Santa Sofía en mezquita, una decisión que ha indignado especialmente al Gobierno griego.</strong></h4> <strong> </strong> La ministra llegó ayer a Ankara, pero el viaje oficial comenzará hoy, con una intensa agenda bilateral con su homólogo turco, <strong>Mevlüt Çavuşoğlu</strong>. El viaje fue acordado por los dos jefes de la diplomacia el pasado 24 de junio, durante un encuentro telemático en el que ambos abordaron, entre otros asuntos, las relaciones entre Turquía y la UE. Precisamente, la ministra española llega a Ankara en <strong>un momento delicado en las relaciones del Gobierno turco de Recep Tayyip Erdogan con la Unión Europea.</strong> El pasado 13 de julio, el Consejo de ministros de Asuntos Exteriores de la UE (CAE) aprobó una resolución en la que pidió a Turquía que pusiera fin a sus “actuaciones unilaterales” en el Mediterráneo oriental (como las perforaciones ilegales en la zona económica exclusiva de Chipre en julio de 2019 o las invasiones en aguas territoriales griegas) y en Libia. En la misma resolución, los ministros condenaron la decisión de Turquía de <strong>reconvertir en mezquita la antigua basílica bizantina Santa Sofia de Estambu</strong>l (patrimonio de la Humanidad desde 1985), por considerar que “contribuirá a alimentar la desconfianza, promover nuevas divisiones entre las comunidades religiosas y debilitar los esfuerzos de diálogo y cooperación”. En respuesta, Mevlut Cavusoglu calificó de “lamentables” las críticas de la UE y recordó que <strong>“en España hubo mezquitas que se convirtieron en iglesias”. </strong> Uno de los países más críticos ha sido <strong>Grecia</strong>, cuyo primer ministro, el conservador Kyriakos Mitsotakis, ha advertido de que la conversión de Santa Sofía (que se materializó oficialmente este pasado viernes) “afecta a las relaciones greco-turcas”. <strong>Grecia</strong> será, precisamente, la siguiente etapa de la gira de González Laya, que llegará mañana a Atenas y regresará por la noche a Madrid. La visita a Grecia había sido acordada durante el encuentro que la ministra mantuvo el pasado 10 de febrero en Madrid con su homólogo griego, <strong>Nikos Dendias</strong>, con quien volverá a reunirse mañana. Aparte, González Laya será recibida por <strong>Kyriakos Mitsotakis</strong> y por la presidenta de Grecia, <strong>Katerina Sakellaropoulou</strong>. Durante aquel encuentro en Madrid, González Laya y Dendias rechazaron expresamente la violación del embargo de armas en Libia por parte de Turquía, tras la decisión del Gobierno de Recep Tayyip Erdogan de reforzar su presencia militar en el país norteafricano para apoyar al gobierno de Acuerdo Nacional del primer ministro Fayez al-Sarraj, apoyado por Naciones Unidas. Esta decisión violaba el acuerdo de la Conferencia de Berlín sobre Libia del pasado 19 de enero, en la que Rusia, la propia Turquía, Egipto, Estados Unidos, Unión Europea, Alemania, Italia y Francia apoyaron un alto el fuego permanente y un embargo de armas verificable. En la citada resolución del pasado 13 de julio, los ministros de Exteriores europeos reclamaron a Ankara que “contribuya activamente a alcanzar una solución política en Libia y respete los compromisos asumidos en el marco del Proceso de Berlín, incluido el embargo de armas de las Naciones Unidas”.Asimismo, instaron al alto representante para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, a "estudiar nuevas vías que puedan contribuir a reducir las tensiones y llegar a acuerdos sobre los problemas que están volviendo cada vez más tensas las relaciones entre la UE y Turquía".