<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>La ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, declaró ayer en Madrid ante Ann Linde, la jefa de la diplomacia de uno de los llamados países <em>frugales</em>, Suecia, que el fondo de recuperación para la salida de la crisis “no es un gasto, es una inversión para todos los países de Europa”.</strong></h4> “El argumento que España siempre utiliza para <strong>defender este fondo de recuperación en forma de transferencias y préstamos, no solamente préstamos y no solamente transferencias</strong>, es doble”, afirmó González Laya durante la rueda de prensa conjunta posterior a su encuentro. “En primer lugar, de lo que se trata es de <strong>hacer funcionar el mercado único europeo, que es el mercado de todos las economías de Europa y que es lo que nos puede sacar rápidamente de la crisis</strong> con menor daño y con menor dolor para nuestras empresas y para nuestros trabajadores”, prosiguió. “El segundo argumento es que <strong>el fondo de recuperación no es un gasto, el fondo de recuperación es una inversión conjunta </strong>que, por supuesto, que todos hacemos”, porque España, al igual que Suecia o Alemania, “también hace una contribución a este fondo de recuperación en una proporción relativa a su riqueza”, continuó la ministra de Asuntos Exteriores. “No lo vemos como un gasto y, por tanto, pensamos que es una inversión que hoy merece la pena para asegurar una salida rápida de la crisis para todas las empresas y todos los trabajadores en Europa”, añadió González Laya, quien anunció que <strong>el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, viajará la próxima semana a Suecia para entrevistarse con el primer ministro, Stefan Lofven</strong>, y avanzó que en 2021 habrá una visita de Estado al país nórdico. “Tanto Suecia como España somos conscientes de lo que nos jugamos en el próximo Consejo Europeo, y yo espero que esta discusión, la visita del presidente del Gobierno a Suecia la próxima semana y la continuación de esta discusión con el primer ministro sueco, pueda llevarnos a apostar por una respuesta rápida y a un consenso europeo la próxima semana”, concluyó, en referencia al próximo <strong>Consejo Europeo de los días 17 y 18 de julio, en el que podrían concretarse los detalles del fondo de recuperación.</strong> La Comisión Europea, Alemania, Francia, España, Italia, Bélgica y otros socios defienden un fondo de recuperación de 750.000 millones de euros, 500.000 millones mediante transferencias y el resto mediante préstamos. Los cuatro países <em>frugales</em> (Países Bajos, Dinamarca, Suecia y Austria, contribuyentes netos a la UE) se oponen, tanto en la cantidad como en la forma, a esta propuesta, que implicaría también la mutualización de la deuda europea generada para salir de la crisis. González Laya recibió el pasado 25 de junio en Madrid a su homólogo de Países Bajos, Stef Blok. En la misma rueda de prensa, <strong>Ann Linde</strong> aseguró que Suecia es consciente del “tremendo impacto” que ha tenido la pandemia en la economía española y afirmó que entre las dos partes “no hay diferencias en cuanto a lo que se necesita” sino en “cómo se tiene que poner en marcha”. A su juicio, las ayudas deberían concederse mediante préstamos, “en la medida de lo posible”, para no comprometer la estabilidad económica de la UE en su conjunto.