<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>La Comisión Europea presentó ayer un paquete de recomendaciones para intentar salvar la temporada turística de 2020 de los estragos de la pandemia del COVID-19 que incluye un levantamiento gradual en tres fases de las restricciones fronterizas.</strong></h4> El objetivo del plan <a href="https://ec.europa.eu/commission/presscorner/detail/es/ip_20_854" target="_blank" rel="noopener noreferrer"><strong><em>Turismo y transporte en 2020 y años posteriores</em></strong></a>, según informó la Comisión, es <strong>“ayudar a los Estados miembros a levantar gradualmente las restricciones de viaje y permitir la reapertura de las empresas turísticas, tras varios meses de bloqueo, respetando las necesarias precauciones sanitarias”</strong>. Aparte, el paquete pretende <strong>“ayudar al sector turístico de la UE a recuperarse de la pandemia, apoyando a las empresas y asegurando que Europa siga siendo el destino número uno para los visitantes”.</strong> La propuesta de la Comisión Europea incluye <strong>un protocolo de desescalada en tres fases</strong>, que comenzaría con una reducción de las restricciones generales a la libre circulación y su sustitución por medidas más específicas, continuaría con una fase intermedia de levantamiento de las restricciones entre zonas o Estados miembros con situaciones epidemiológicas equiparables y concluiría con el levantamiento generalizado de las restricciones. Para ello, advierte Bruselas, los Estados miembros deben partir de <strong>tres criterios comunes</strong>: la situación epidemiológica, la capacidad para aplicar medidas de contención durante todo el trayecto, incluidos los pasos fronterizos, y las consideraciones económicas y sociales. Todo ello implica, entre otras medidas, la adopción de un enfoque común para restablecer la libre circulación y levantar las restricciones en las fronteras internas de la UE de manera gradual y coordinada; la creación de un marco para apoyar el restablecimiento gradual de los transportes, garantizando al mismo tiempo la seguridad de los pasajeros y del personal; la recomendación de los vales de viaje como alternativa al reembolso en efectivo para los consumidores; y la adopción de criterios para restablecer las actividades turísticas de forma segura y gradual y para elaborar protocolos de salud en los establecimientos turísticos, como los hoteles. Asimismo, el paquete de la Comisión se propone <strong>apoyar al sector turístico de Europa</strong>, asegurando la liquidez de las empresas turísticas, en particular de las PYMES. Asimismo, Bruselas recomienda el lanzamiento de campañas de comunicación para presentar a Europa como “un destino turístico seguro” y recuerda que la propia Comisión Europea ha puesto en marcha un instrumento de solidaridad de 100.000 millones de euros, denominado SURE, para ayudar a trabajadores y empresas a superar las consecuencias económicas del COVID-19. <h5><strong>La situación de España</strong></h5> El turismo representa el 10% del PIB y casi el 12% del empleo en la UE, primer destino a nivel mundial, con más de un 40% del mercado y con 562 millones de llegadas internacionales al año. <strong>España recibe anualmente alrededor de 80 millones de turistas que generan el 12% del PIB.</strong> Las autoridades de Alemania y del Reino Unido (los países que más turistas aportan a España) ya han advertido a sus compatriotas de que este verano no podrán viajar a nuestro país debido al coronavirus. Fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores indicaron recientemente que <strong>el Gobierno español sólo abrirá las fronteras con el resto del espacio Schengen cuando se hayan alcanzado plenamente los objetivos del Plan de Transición para la Nueva Normalidad en todo el territorio nacional, lo cual no se espera que suceda antes de principios de julio.</strong> Asimismo, España ha reclamado que todos los Estados miembros se rijan por los mismos criterios a la hora de abrir sus fronteras.