The Diplomat
El Gobierno de España condenó ayer “firmemente el cruel asesinato del opositor venezolano Edmundo Rada” y reclamó a las entidades venezolanas competentes “una investigación expedita e imparcial de las circunstancias” de su muerte que conduzca “a identificación de los responsables y su puesta a disposición de la justicia”.
España insiste en la importancia de que dichas entidades apliquen las recomendaciones formuladas por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) para prevenir y sancionar las violaciones de derechos humanos en Venezuela, añadió el Ministerio de Asuntos Exteriores en un comunicado.
El autoproclamado residente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, denunció este pasado jueves que Edmundo Rada, popularmente conocido como Pipo y concejal del municipio venezolano de Sucre por el partido opositor Voluntad Popular, «apareció calcinado, con dos tiros de gracia y una bolsa puesta en la cara» y aseguró que había “claros indicios de que la causa es política” y de que se trata de “un asesinato de la dictadura«. La Fiscalía venezolana ha abierto una investigación.