<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El secretario de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica y el Caribe, Juan Pablo de Laiglesia, criticó ayer a los sectores que “pretenden banalizar la solidaridad” e incluso “intentan poner bajo sospecha y criminalizan" el trabajo de las ONG.</strong></h4> Durante un acto público en la sede de la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECID) con motivo del Día de Cooperante, que se celebra mañana, el secretario de Estado transmitió las reivindicaciones de los cooperantes españoles, que exigen un mayor reconocimiento profesional y personal de su labor, una actualización del Estatuto del Cooperante y un incremento de las inversiones en materia de cooperación. Al respecto, De Laiglesia reconoció que el <strong>Estatuto del Cooperante</strong> "está un tanto obsoleto" y lamentó que en esta legislatura “no ha sido posible” incrementar la partida de los <strong>Presupuestos Generales del Estado</strong> destinadas a la cooperación porque la situación política ha obligado a prorrogar las cuentas del año 2018. Por ello, el secretario de Estado expresó su esperanza de que en el próximo ejercicio se puedan cumplir estas demandas y se mejoren las condiciones de los cooperantes, especialmente en lo referente a la regulación de la cooperación como carrera profesional y a la mejora de las condiciones laborales y de la cobertura de sus derechos sociales. Asimismo, De Laiglesia advirtió de que "hace falta voluntad política suficiente para modificar marcos presupuestarios, legales y administrativos" en el ámbito de la cooperación y defendió, por ello, <strong>el consenso político para "recuperar la política de cooperación y hacerla un centro de la actividad de la acción exterior".</strong> Durante su intervención, que comenzó con un minuto de silencio por el asesinato de dos cooperantes de Acción contra el Hambre en Etiopía, Juan Pablo de Laiglesia criticó duramente "a las fuerzas que pretenden banalizar la solidaridad e ignorar los desafíos acuciantes”, como "el cambio climático, las persistentes identidades de género o el crecimiento aparentemente imparable de las desigualdades", y lamentó que <strong>algunos sectores "intentan poner bajo sospecha" el trabajo de las ONG e "incluso las criminalizan".</strong> Por su parte, <strong>la directora de la AECID, Aina Calvo</strong>, recordó que la labor de los cooperantes tiene "un riesgo claro" porque se enfrentan a "un mundo injusto y despiadado" y aseguró que el mundo sería mucho peor sin estos profesionales que "merecen apoyo real institucional y del conjunto de la sociedad".