<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El Rey Emérito Don Juan Carlos comunicó ayer a su hijo, el Rey Felipe VI, su intención de abandonar toda su actividad institucional a partir del 2 de junio, justo cuando se cumplirán cinco años de su abdicación del Trono.</strong></h4> “A lo largo de estos últimos años, desde mi abdicación de la Corona de España el 2 de junio de 2014, he venido desarrollando actividades institucionales con el mismo afán de servicio a España y a la Corona que inspiró mi reinado”, se lee en <a href="http://www.casareal.es/ES/AreaPrensa/Paginas/area_prensa_comunicados_interior.aspx?data=108">la carta remitida por Juan Carlos I a su hijo</a><strong>. “Ahora, cuando han transcurrido casi cinco años desde aquella fecha, creo que ha llegado el momento de pasar una nueva página en mi vida y de completar mi retirada de la vida pública”</strong>, prosigue. <strong>“Desde el año pasado, cuando celebré mi 80 cumpleaños, he venido madurando esta idea, que se reafirmó con motivo de la inolvidable conmemoración del 40 Aniversario de nuestra Constitución en las Cortes Generales”</strong>, un “acto solemne, lleno de emoción para mí, que me hizo evocar, con orgullo y admiración, el recuerdo de tantas personas que contribuyeron a hacer posible la Transición política y renovar mi sentimiento de permanente gratitud hacia el pueblo español, verdadero artífice y principal protagonista de aquella trascendental etapa de nuestra historia reciente”, afirma el Rey Emérito. <strong>“Con una firme y meditada convicción, hoy te expreso mi voluntad y deseo de dar este paso y dejar de desarrollar actividades institucionales, a partir del próximo 2 de junio”</strong>, concluye la carta, en la que el Rey Emérito expresa su “gran cariño y orgullo de padre” hacia el actual monarca. Juan Carlos I estuvo al frente de la Corona durante <strong>39 años</strong>, exactamente desde el 22 de noviembre de 1975, cuando juró un cargo inicialmente otorgado por Francisco Franco y que fue posteriormente sancionado por la Constitución del 6 de diciembre de 1978 y avalado por su intervención en el intento de golpe de Estado del 23 de febrero de 1981. En junio 2014 anunció su abdicación coincidiendo con un cierto deterioro de la imagen de la Monarquía, especialmente intenso desde 2012, cuando, en plena crisis económica, se vio forzado a pedir perdón por participar en una cacería de elefantes en Botsuana. <strong>Desde su abdicación, Don Juan Carlos siguió representando a la Corona y al Estado en algunos actos institucionales dentro y fuera de España</strong>, como las investiduras de algunos presidentes en América Latina o los funerales por Fidel Castro o el Gran Duque Jean de Luxemburgo. En junio de 2017, el Rey Emérito no fue invitado a los actos conmemorativos del 40 aniversario de las primeras elecciones democráticas, lo cual le generó un evidente malestar. El 6 de diciembre de 2018, como recuerda en su carta, sí fue invitado, junto a la Reina Sofía, a las celebraciones por el 40 aniversario de la Constitución en el Congreso de los Diputados. <strong>Sus últimos actos públicos</strong> fueron la visita a la capilla ardiente de Alfredo Pérez Rubalcaba y la entrega del Premio Órdenes Españolas 2019 al historiador Miguel Ángel Ladero.