The Diplomat
El Gobierno de España condenó ayer en un comunicado el asesinato, el pasado viernes 15 de febrero, del sacerdote salesiano español Antonio Cesar Fernández, que se encontraba viajando en ese momento por Burkina Faso en dirección a Uagadugú, en donde residía. El ataque terrorista tuvo lugar cerca de la localidad de Cinkanssé, en Burkina Faso, muy cerca de la frontera con Ghana y Togo. Además del religioso salesiano español hay más fallecidos.
En una nota difundida por el Ministerio de Asuntos Exteriores, el Ejecutivo expresó «la más enérgica condena y consternación» por lo sucedido y se pide a las autoridades de Burkina Faso la apertura de una investigación.