<h5><strong>The Diplomat</strong></h5> <h4><strong>Don Felipe y Doña Letizia efectuaron ayer la primera jornada de su visita de Estado a Angola, la primera que efectúan a un país de África Subsahariana, en el curso de la cual el Rey destacó la “proyección y vocación africanas” de España.</strong></h4> Los Reyes, que viajan acompañados por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, y la secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez, llegaron a última hora del lunes al Aeropuerto Internacional Quatro de Fevereiro en Luanda, donde fueron recibidos por el embajador de España en Angola, Manuel Lejarreta, y el ministro de Relaciones Exteriores de Angola, Tète António. La jornada de ayer comenzó con una visita al Memorial Agostinho Neto, donde los Reyes depositaron una corona y guardaron un minuto de silencio ante el monumento, en el que descansan los restos del primer presidente de la Angola independiente, António Agostinho Neto. A media mañana, los Reyes se dirigieron al Palacio Presidencial, donde fueron recibidos oficialmente por el presidente de Angola, João Manuel Gonçalves Lourenço, y la primera dama, Ana Afonso Dias. Tras la ceremonia de recibimiento, el Rey mantuvo un encuentro con Lourenço, mientras Doña Letizia se reunía, acompañada por la primera dama y presidenta de la Fundación Ngana Zanza, con un grupo de mujeres líderes de la sociedad civil de Angola para abordar la educación como factor de empoderamiento. Finalizados los encuentros, los Reyes se reunieron con el presidente de Angola y la primera dama para asistir a la firma de los Memorandos de Entendimiento en materia de deportes, industria 4.0 y escuelas diplomáticas. <h5><strong>Intercambio de condecoraciones</strong></h5> A continuación, en la Sala Noble del Palacio tuvo lugar la ceremonia de intercambio de condecoraciones, en la que el presidente Lourenço recibió el Collar de la Orden del Mérito Civil y su esposa la Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil. Por su parte, Felipe VI y la Reina recibieron el Collar de la Orden de Agostinho Neto. Durante el acto, el Rey afirmó que, aparte de su “identidad europea” y su “bien conocida proyección iberoamericana y atlántica por evidentes razones históricas, culturales y lingüísticas”, España cuenta también con una “proyección y vocación africana, tanto en la ribera del Mediterráneo, como hacia el sur de este extenso continente”. <strong>“En los últimos años, el Gobierno español, junto con la sociedad civil en distintos ámbitos y el sector privado, ha trabajado por conocer mejor la realidad del continente en su conjunto y, en particular, de África Subsahariana”</strong>, prosiguió. “Fruto de ello son los planes y programas que se han puesto en marcha para aumentar nuestra presencia y cooperación con los países africanos y establecer una asociación estratégica que permita abordar juntos los numerosos retos globales”, añadió. “En este objetivo, necesitamos socios con capacidad, credibilidad y voluntad con los que, partiendo de una confianza mutua, España pueda estar más presente en la región en beneficio de todos”, afirmó el Monarca. “Es en este contexto donde Angola es para España un país prioritario por su estabilidad política y social, por sus recursos y buenas perspectivas económicas y por su activa diplomacia regional y multilateral”, además de “por los sólidos lazos que ya nos vinculan, partiendo de una relación de casi cincuenta años, que comenzó poco después de que Angola accediera a la independencia”, añadió. <strong>“Se trata, en definitiva, de que España sea una referencia para Angola en Europa y de que Angola lo sea para España en esta parte del mundo”</strong>, manifestó. Posteriormente, el presidente de Angola y la primera dama ofrecieron un almuerzo privado a los Reyes. Por la tarde, Don Felipe y Doña Letizia se trasladaron al Banco Económico, donde asistieron a la presentación de la Universidad Internacional de Cuanz -integrada en la red de instituciones colaboradoras con la Fundación Universitaria Iberoamericana (FUNIBER)- e inauguraron la exposición de Joan Miró <em>El Cántico del Sol y las Maravillas Acrostáticas</em>, con obras de la colección privada de esta entidad. La jornada finalizó con una recepción de los Reyes a la colectividad española en Angola, donde hay algo más de 500 españoles registrados, entre empresarios, religiosos, docentes y cooperantes.