Sánchez a su llegada a Enköping./ Foto: Pool Moncloa/Fernando Calvo
The Diplomat. 06/09/2018
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el primer ministro sueco, Stefan Löfven, reclamaron ayer que todos los países europeos asuman “su responsabilidad” en la cuestión migratoria a pocos días de que se celebren en Suecia unas elecciones generales que podrían ser muy favorables para la extrema derecha xenófoba.
Durante el encuentro, celebrado en la ciudad sueca de Enköping, al oeste de Estocolmo, ambos dirigentes compartieron su “visión progresista y vocación europeísta en la defensa de los valores fundamentales que sustentan la Unión Europea” y expresaron su voluntad de “trabajar juntos en la búsqueda de soluciones a los grandes desafíos que afectan a Europa, como el Brexit”, según informó Moncloa.
Tras el encuentro oficial, Sánchez participó en un acto electoral de los socialdemócratas suecos con vistas a las elecciones generales del domingo, en las que los sondeos prevén una victoria ajustada del partido de Löfven y un importante auge de la ultraderecha, que podría quedar en segunda posición. Al igual que en otros países europeos, la extrema derecha se ha aprovechado de la crisis de los refugiados para ganar partidarios. En 2015, Suecia fue el país con mayor número de refugiados per cápita de la UE, con más de 163.000.
Precisamente, durante la rueda de prensa posterior a la reunión oficial, Sánchez y Löfven mostraron su “plena sintonía” ante la cuestión migratoria y defendieron un enfoque global sobre esta materia que, según la nota de Moncloa, “aúne la responsabilidad común y solidaridad de todos los Estados y que tenga como eje vertebrador el diálogo y cooperación con los países de tránsito y de origen y el respeto a los derechos humanos”.
[hr style=»single»]
La visita del presidente llega en vísperas de unos comicios que podrían favorecer a la extrema derecha
[hr style=»single»]
Al respecto Pedro Sánchez advirtió de que el tema migratorio es “un desafío común que requiere una respuesta europea” y Löfven pidió que todos los países europeos “asuman su parte de responsabilidad común, porque tenemos fronteras comunes».
Aparte, Pedro Sánchez expresó su “admiración” hacia el Ejecutivo sueco por su papel de liderazgo en la defensa y promoción en Europa del pilar social, que supone «una prioridad de ambos gobiernos» y que ha servido de “fuente de inspiración para muchos gobiernos europeos». Precisamente, el tema social y laboral es otro de los argumentos de la extrema derecha para arremeter contra la UE.
Los dos dirigentes volverán a encontrarse el próximo 20 de septiembre con motivo de la reunión informal de jefes de Estado y de Gobierno de la UE, que se celebrará en Salzburgo, en Austria -el país que actualmente ejerce la Presidencia del Consejo-, y en la que los Gobiernos europeos dejarán claras sus posiciones respecto al tema migratorio.