Enrique Miguel Sánchez Motos
Administrador Civil del Estado
El fugitivo Puigedmont, cuenta con su acta de diputado, cosa sorprendente dada su condición de fugitivo. Obviamente la legalidad vigente no impide literalmente que un fugitivo de la Justicia adquiera la condición de diputado. El artículo 23 del Reglamento del Parlament de Cataluña establece como requisitos para acceder a la condición de diputado: “Presentar al Registro General del Parlamento la credencial expedida por el órgano correspondiente de la Administración electoral y prometer o jurar respetar la Constitución española y el Estatuto de autonomía de Cataluña y presentar las declaraciones de actividades y de bienes”.
Cabría preguntarse qué ocurre en estos casos en otros países pues no es lo mismo estar en España que estar huido en otro país. Aquí los cinco diputados, huidos a Bélgica o detenidos en prisión preventiva, han accedido a su condición de diputados. Es más, a los que están en la cárcel, como es el caso de Junqueras, el juez Pablo Llarena, les ha reconocido la posibilidad de puedan ejercer su voto por delegación para la elección del President.
En el caso del Congreso español, el artículo 15 de su Reglamento establece que “los Diputados tendrán el deber de asistir a las sesiones del Pleno del Congreso y de las Comisiones de que formen parte”. Parece obvio que la presencia física deba ser exigible para poder ejercer como diputado y percibir el correspondiente salario. Esa obligación no aparece explícitamente entre los deberes de los diputados del Parlament (artículos 14 a 19) probablemente porque se consideró obvio cuando se redactó el Reglamento que se debe asistir. Tampoco está explícitamente prohibido que se pueda elegir Presidente a un Diputado fugitivo y que éste pueda residir fuera de Cataluña. Obviamente ni al genio surrealista de Salvador Dalí se le hubiera ocurrido.
Por ello el Presidente Rajoy va a tener, gracias a la candidatura de Puigdemont una nueva oportunidad. Hasta el momento, su gestión[ESM1] del referéndum y de la Declaración Unilateral de Independencia y de todo el entramado de presuntos delitos de rebelión, sedición, malversación, prevaricación y desobediencia ha sido nefasta. Prueba es la casi desaparición del PP en Cataluña y su al parecer imparable y continuada caída en las encuestas en el resto de España. La corrupción va a pasar factura al PP pero lo más determinante ha sido la incapacidad del Gobierno de Rajoy ante secesionismo que es la más grave amenaza que España enfrenta hoy.
Sin embargo, la insistencia, que confiamos será sin duda jurídicamente derrotada, de los secesionistas de querer elegir a un President virtual, ofrece a Rajoy algo impensable: prolongar, quien sabe cuánto tiempo, la aplicación del 155 hasta que no haya nuevo President de la Generalitat. Esta vez tiene la oportunidad de hacerlo con contundencia, en defensa del interés general, dando claras instrucciones en cada Consejería catalana para poner en marcha actuaciones que corrijan el odio, la discriminación y la marginación de lo español que caracterizan al secesionismo.
Dar cumplimiento a las sentencias del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña y otros; requerir el cumplimiento inmediato de la ley de Banderas y el respeto inequívoco a los signos de España; revisar de inmediato los libros de texto que se utilizan; dar instrucciones a los colegios para fomentar la convivencia democrática; supervisar todos los expedientes de gasto, contrataciones y subvenciones para garantizar que no se destinan al adoctrinamiento y a fomentar la separación; ordenar la rotulación bilingüe; dar instrucciones para la utilización del castellano y del catalán en condiciones de plena igualdad y convivencia, etc, etc. (Si necesitan ideas concretas adicionales, verán como es fácil encontrarlas).
Presidente Rajoy, probablemente es demasiado tarde para sacar a su partido de la debacle a la que le ha llevado su gestión. Pero aún es tiempo para rectificar y ofrecer un servicio a España, estableciendo medidas firmes, serenas, que fomenten la convivencia entre todos los pueblos de España y que enfrenten de raíz al grave conflicto civil al que el separatismo ha llevado a Cataluña y al que quieren llevar a España entera.
Visca Espanya, viva Cataluña.
30/01/2018. © Todos los derechos reservados